Durante 16 años, se capacitó y nutrió de conocimientos; asimiló nuevas tecnologías sobre mecánica, ingeniería y diseño, y las aplicó en la empresa de la cual es fundador. Actualmente, es desarrollador de proyectos, consultor técnico, asesor internacional, modulador, conferencista y docente
Redacción
El doctor Enrique Villavicencio, presidente de ACEMIRE, comparte su experiencia en el negocio y su perspectiva hacia el futuro. Su amplia preparación académica lo ha conducido al desarrollo de múltiples proyectos de investigación, entre los que destacan el tratamiento de Alquilarilo, pensado para el uso de lubricante sintético en sistemas de refrigeración y aire acondicionado, el cual posee la patente de invención desde 1980 por la Dirección General de Invenciones y Marcas
Mundo HVAC&R (MH): Sus especializaciones y estudios, ¿cómo le han ayudado a mejorar las actividades que actualmente realiza?
Enrique Villavicencio (EV): Inicié con la carrera de ingeniero químico; después con la maestría y doctorado en finanzas. Aprendí las matemáticas, los números, el dinero; y después tuve oportunidad de estudiar dos maestrías en humanidades (una en orientales y otra en occidentales), las artes liberales le proyectan a uno la parte humana… Se vuelve una complejidad, un arma secreta. Desde la materia hasta el alma, un negocio que está constituido desde lo más sólido hasta el espíritu. Me han ayudado mucho, sobre todo, a comprender las cosas de la vida y de los negocios, porque el filósofo busca qué hay atrás y el hombre quiere construir su plataforma profesional y moral.
MH: ¿Qué lo llevó a fundar la empresa?
EV: Estuve en la fundación de ACEMIRE en 1974, desarrollando aceites de refrigeración, diseñando equipo, trabajando en el laboratorio y obteniendo las patentes. En 1991, me decidí a fundar mi propia compañía, donde me especialicé en lubricación, química del petróleo, desgaste, fricción y el uso eficiente de la energía. En el 2007, surgen cambios vitalicios en el Consejo de Administración de ACEMIRE, me conceden parte accionaria de la empresa. Entonces tuve que reintegrarme y tomar el reto.
Dejé ACEMIRE en 1991 y durante 16 años me dediqué a capacitarme, nutrirme de conocimientos, deasimilar nuevas tecnologías, de mecánica, de ingeniería, de diseño. En 2007, regresé a la empresa a infundirle toda la nueva energía con una visión hacia el siglo XXI.
MH: ¿A quién podría considerar usted su maestro de vida?
EV: Primero, ha sido la supervivencia. Querer sobrevivir y destacar como persona, como individuo, me ha ayudado a buscar soluciones. En cuanto a quién, no podría mencionar un sólo maestro; son todos los que han dejado una huella en mi vida, con quienes he enfrentado y solucionado problemas. Hablando en un plan de negocios, considero que Warren Buffet, Donald Trump, Ackoff, han sido ejemplos a seguir.
MH: Sus aportes para lograr un crecimiento en la empresa, ¿cuáles han sido?
EV: Han sido aportaciones en tecnología, incorporación de ideas y prácticas de los líderes en el ramo; ampliar la visión y sobre todo ser un buen guía para la empresa.
MH: Desde su punto de vista y experiencia, ¿qué considera que hace falta en el sector para que siga creciendo?
EV: Falta mucha capacitación en los conceptos y nociones de hacia dónde va el mundo. La gente está preocupada en armar el equipo, que tengan una visión global y de integrarse a ella. Veo que muchos ingenieros nos encontramos muy ocupados en el día a día y no estamos viendo hacia la dirección del mundo, no sólo de México y Estados Unidos, y sobre eso mantener un objetivo. Se requiere mucha actualización. En México no existe una formación en la refrigeración, no ha llegado a entrar, a entenderse todo lo que hay y viene de fuera, es traído, emulado.
MH: ¿Cuál ha sido su desafío más grande y qué le ha aportado?
EV: Como profesional y como empresario, mantenerme vigente y por más de 35 años en el mercado y consolidar un equipo de trabajo han sido mis desafíos.
MH: ¿Sus mayores logros?
EV: Mis amigos, obtener y mantener clientes leales. Introducir nuevos conceptos y tecnologías, y poder convertir una idea en realidad a través de los años y ser líder en el mercado.
MH: ¿Qué quisiera aportarle a las nuevas generaciones?
EV: Lo más importante: que no renuncien ni se rindan; que si se caen, se levanten. Fijarse objetivos, estudiar; reconocer que no todo es dinero, también hay ideales. Integrar todo esto y salir siempre adelante.