Los grandes centros urbanos se ahogan a consecuencia de los altos índices de contaminación. Los casos registrados dejan ver que controlar la concentración de contaminantes en el aire resulta ya no sólo un asunto de responsabilidad ambiental, sino de vida o muerte.
El problema es ambiental, pero también de salud.
Eréndira Reyes.
La población china inició el año respirando gases tóxicos. La densidad registró el índice más peligroso de PM con 2.5 micrómetros por diámetro, todo esto a consecuencia de la actividad industrial, la combustión de carbón y las actividades humanas cotidianas.
Existen dos tipos de partículas que son especialmente dañinas, la PM 10, de menos de 10 micras de diámetro, y la PM 2.5, que mide 2.5 micras. El peligro que representan es su facilidad de entrar al tracto respiratorio. El problema, además de ambiental, es de salud, pues este tipo de partículas causan diversas enfermedades, como bronquitis crónica, asma, cáncer de pulmón, parálisis cerebral, infarto de miocardio o problemas durante el embarazo.
En el caso de la República Oriental de China ya existen consecuencias. La contaminación de aire causó 1.2 millones de muertes prematuras en 2010, lo que representó el 40 por ciento de todos decesos registrados en el mundo.
 La inhalación de dióxido de azufre es altamente irritante y puede provocar obstrucción bronquial |
Un grupo de investigadores decidió examinar la composición de PM 10 y PM 2.5 durante un periodo de contaminación en la ciudad de Beijing, tras lo cual identificaron 1 mil 300 especies microbianas diferentes. A pesar de que la mayoría son benignas, existen algunas que son responsables de alergias y enfermedades respiratorias. Además de neumococos, encontraron hongos que provocan graves infecciones y un número pequeño, pero significativo, de bacterias que generalmente se encuentran en las heces.
Lo más preocupante, según comentan las autoridades sanitarias, es el aumento en la proporción de estos patógenos en el aire, ya que cada día existen mayores concentraciones de PM 10 y 2.5, lo que concentra bacterias, monóxido de carbono, dióxido de azufre, óxido de nitrógeno y O3.
Las principales fuentes de monóxido de carbono son el tráfico de automóviles y la industria. Este gas se considera un veneno para la sangre, debido a que se fija en ella y disminuye el oxígeno que necesita. Dicha situación puede producir una intoxicación grave y síntomas como dolor de cabeza, náuseas, vómitos, mareos y hasta la muerte.
El resultado de la combustión de ciertos carbones, aceites o combustibles provoca la emisión de dióxido de azufre y China es, a nivel mundial, uno de los mayores emisores. La inhalación de dicho gas es altamente irritante y puede provocar obstrucción bronquial, disminución en la frecuencia respiratoria, así como irritación estomacal.
Los óxidos de nitrógeno se forman durante la combustión a alta temperatura y se producen principalmente en plantas de calefacción, carbón y en la industria pesada. Pueden provocar bronquitis, asma y lluvia ácida.
El ozono (O3) es el contaminante principal y se genera de manera natural en la estratosfera. Cuando éste se encuentra en las capas bajas de la atmósfera, es muy peligroso y provoca graves problemas pulmonares y respiratorios, inflamación bronquial e irritación ocular.
Las hospitalizaciones que provoca la contaminación alcanzan 14 mil casos por año, lo que demuestra la sensibilidad de la población a este problema
 Durante los últimos años, México ha registrado un aumento significativo en los contaminantes del aire |
Qué ocurre en México
En el Valle de México, se han registrado durante los últimos años alzas importantes en los contaminantes del aire, por lo que incluso se han establecido nuevos organismos que registran y dictaminan estudios alrededor del tema, como el caso de ProAire.
El Instituto Mexicano para la Competitividad, A. C. (IMCO), desarrolló recientemente una calculadora para identificar los daños en la salud provocados por partículas de 10 micras (PM10). Dichos resultados se tabularon y estudiaron con el objetivo de determinar su impacto económico. La estadística registró la contaminación existente en distintas zonas de la República Mexicana e identificó la poca vigilancia que existe en las ciudades en desarrollo.
Otros datos, como los que recogió El Poder del Consumidor, muestran que el Sistema de Monitoreo Atmosférico (Simat) registró en 2013 una concentración de contaminantes que presentaban niveles dañinos para la salud de la población en al menos 362 días del año, debido a que las densidades de ozono y de PM 10 y PM 2.5 rebasaron los 50 puntos del Índice Metropolitano de la Calidad del Aire, lo que en representa una calidad de aire mala o muy mala. También se registraron concentraciones de ozono que rebasaban la normatividad mexicana durante 126 días y expusieron a la población 89 por ciento de los días a índices que dañan las vías respiratorias, principalmente a niños.
Por otro lado, la publicación destacó que las dependencias ambientales no toman en cuenta las partículas de 2.5 micras, por lo que demandan, junto con otras organizaciones, la actualización de las normas que regulan la calidad en el aire al representar un peligro para la salud nacional. Además, arrojaron una cifra significativa: al menos 14 mil muertes al año están vinculadas con esta situación.
Paralelo al artículo, el IMCO reporta el costo que representa la contaminación del aire y desglosa cifras divididas en dos grupos: los estados que tienen un organismo que vigila la calidad del aire y las entidades que no lo hacen y en las que se tuvo que realizar una estimación. Los resultados de este cálculo aparecen en un mapa que separa por colores la contaminación registrada en el país. La estimación de muertes que se registran anualmente es, según este estudio, de más de 5 mil, y están asociadas con la contaminación por partículas menores a 10 micras. Este número surge de los análisis epidemiológicos aplicados en dependencias nacionales de salud.
 La contaminación está relacionada con la cantidad de automóviles en las ciudades |
Ahora bien, las hospitalizaciones asociadas con la contaminación arrojan 14 mil casos por año, mientras que el número de consultas alcanzó las 818 mil 679. Estas cifras se calcularon con estimaciones que reflejan qué tan sensible es la población de cada ciudad a visitar al médico debido a problemas asociados con la calidad del aire y que presentan cuadros asmáticos, de infecciones respiratorias y enfermedades isquémicas del corazón.
Los gastos en salud ascienden a 728 millones de pesos por año y fueron el resultado de multiplicar el número de hospitalizaciones y consultas atribuibles a la contaminación por el costo unitario por evento y por el número de días promedio requeridos para la atención médica. Además, el estudio también revela las pérdidas de productividad que se obtuvieron al multiplicar los días laborales perdidos a causa de las hospitalizaciones y consultas por el salario promedio diario y por los días de atención médica que tuvieron que asignarse a cada paciente. A la cifra también se le añadieron los costos por los años productivos perdidos en personas que pudieron trabajar para el país por lo menos 15 años más y murieron prematuramente. Esta cifra alcanza los 3 mil 396 millones de pesos anuales.
Los resultados catastróficos vividos en la nación asiática y los que pueden originarse por la similitud de circunstancias en México son sumamente parecidos. Las acciones de prevención resultan cada día más urgentes. La contaminación del aire en estas magnitudes está relacionada principalmente por la abundancia de automóviles que circulan en la metrópolis, cantidad que va en aumento. Asimismo, la búsqueda de alternativas energéticas que contrarresten estos números están disponibles, desde la generación mediante fuentes no fósiles que disminuyan la liberación de contaminantes, hasta los esquemas de reducción en el consumo en los hogares y los grandes edificios, pues lo que reflejan las cifras es que la población mexicana se encuentra ante un panorama tóxico que la puede ahogar.
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Fuentes:
1. http://ecologie.blog.lemonde.fr/2014/02/26/que-contient-vraiment-le-nuage-de-pollution-a-pekin
2. http://www.sma.df.gob.mx/sma/links/download/biblioteca/flippingbooks/proaire2011_2020/
3. http://elpoderdelconsumidor.org/
4. http://imco.org.mx/calculadora-aire
