El panorama de la refrigeración industrial ha cambiado debido a la utilización del CO2 como refrigerante. Si bien es una alternativa en el tema ambiental y ofrece mayor eficiencia en los procesos, en América Latina el avance es lento por la escasa comercialización y falta de capacitación de los operadores
Hernán Hidalgo
El sector de la refrigeración industrial a escala global ha tenido un crecimiento moderado en los últimos cinco años. El desarrollo es más notable en Europa y en el mercado norteamericano debido a los cambios tecnológicos que se ha brindado a la industria en general.
Un factor que influyó en este crecimiento fue la necesidad de hacer modificaciones a los sistemas de refrigeración industrial; en particular, en los refrigerantes que se utilizan para la conservación y la congelación de alimentos.
La industria ha tenido la ventaja de usar refrigerantes naturales como el amoniaco; pero en los últimos 10 años, los cambios en cuanto a la cantidad de amoniaco que utilizan en plantas de manufactura han generado que se busquen alternativas más prácticas y seguras. El amoniaco es bastante empleado, pero crea problemas por su alta toxicidad.
En China y en otros países donde la concentración de gente es demasiada, ha estado emergiendo el uso de otros refrigerantes naturales para reducir la cantidad de amoniaco que se utiliza en los sistemas. En este aspecto, el CO2 surge como tecnología que podría sustituir al amoniaco, ya que además de no ser tóxico, su impacto en el medioambiente es menor. El CO2 tiene muy buenas características de refrigeración y es sencillo utilizarlo, a pesar de que es relativamente nuevo para el sector industrial.
¿Sustituir al amoniaco?
Es complicado adaptar un sistema que ya opera con amoniaco para que use CO2; sin embargo, las plantas de manufactura se expanden y el mercado crece, por lo que en un futuro se podría realizar fácilmente la sustitución en el sistema de refrigeración industrial, lo cual representaría una forma interesante de crecer.
Hace 14 años, Danfoss Industries tomó la iniciativa de tener una plataforma que tuviera los requerimientos para funcionar con amoniaco y CO2. La compañía cambió la especificación para que todos sus productos en refrigeración industrial tuvieran la capacidad de trabajar con ambos refrigerantes. Así se le otorgó flexibilidad, no sólo al usuario final de la industria, también a los contratistas e instaladores.
Respecto de la innovación tecnológica, ésta se halla en dos sentidos: la mecánica y la electrónica. En cuanto a la mecánica, encontramos los materiales que se utilizan y sus especificaciones. Lógicamente, el diseño y las funciones se han modificado para tener la capacidad de trabajar con ambos refrigerantes. La parte electrónica, en particular la de los controles, también ha jugado un papel muy importante para poder implementar el CO2, para ofrecer confiabilidad y seguridad a la industria, y así cumplir con normatividades.
El mercado de América Latina está atrás en comparación con otros mercados; sin embargo, sí hay quienes utilizan estos refrigerantes en sus sistemas. Son pocos, pero los hay.
Algunos segmentos del mercado que han estado utilizando tecnología CO2 son los cuartos fríos para centros de distribución. En Estados Unidos, las empresas que trabajan en este segmento han tomado en su estrategia corporativa el cambio a refrigerantes naturales. El CO2 es de las alternativas más atractivas, ya que permite ciertos ahorros energéticos y aumenta el nivel de seguridad, no sólo en el producto que almacenan, sino para operadores y empleados.
Otro segmento es el proceso de congelación a baja temperatura: -40 o -45 grados centígrados. Por ello, los fabricantes de helado utilizan el CO2, porque a esas temperaturas el beneficio y la rentabilidad incrementan bastante, respecto de un sistema que utiliza amoniaco.
Qué pasa con la refrigeración comercial
Los supermercados han tomado un rumbo diferente; inclusive, América Latina no se muestra tan atrás en las estadísticas como en el sector industrial.
En refrigeración comercial se han visto muchos avances en Brasil y Argentina con los sistemas de cascada. En Europa, sobre todo de Alemania hacia arriba, en Canadá y Estados Unidos de América, países con condiciones climatológicas frías, se utilizan los sistemas que operan con CO2. En esos países sí se ha visto un incremento mayor.
La refrigeración industrial va a pasos más lentos, pero se ha visto un desarrollo considerable en Canadá, Estados Unidos, Europa y Japón. Este último ha adoptado drásticamente el CO2, debido a sus compromisos de reducción de emisiones contaminantes.
Cuando se usan refrigerantes HFC, como el 404 o 507, las fugas tienen efectos catastróficos en el medioambiente, ya que propagan una alta cantidad de emisiones de CO2 –paradójicamente–, que son 800 mil veces más contaminantes que si se usa el refrigerante CO2.
A medida que los usuarios finales de las diferentes industrias comparten esos conocimientos, comienzan a buscar y explorar cómo pueden optimizar sus plantas de manufactura, en el presente y en el futuro. Este refrigerante natural, empleado en la refrigeración industrial, avanza, no al mismo paso que en sistemas comerciales, pero se están viendo los beneficios.
Disponibilidad
El CO2 tiene muchos beneficios pero tampoco implica que sea la absoluta solución para todos. En ciertos casos, el amoniaco es la mejor opción. Las empresas que fijan sus objetivos en reducir el uso de amoniaco en sus procesos pueden valerse del CO2, el cual hace un excelente trabajo.
También han surgido otras tecnologías que reducen, en el proceso industrial, la cantidad de amoniaco. En otras palabras, no hay una solución aplicable para todas las plantas de manufactura. El CO2 va a ser una fuerza mayor; aun así, el amoniaco también ofrece ventajas.
En países desarrollados, el CO2 se consigue fácilmente y es más económico que el amoniaco. Ese es un gran incentivo para que las manufactureras lo utilicen en sus procesos. Los retos que tiene el sector industrial en América Latina será adoptar tecnologías que utilicen CO2 y tener a operadores calificados.
Sabiendo los beneficios, la inversión la puede hacer cualquiera. Pero si no hay quién capacite a la gente para poder operar el sistema, lo que se compra es un problema. Entonces, las compañías que han adoptado esa tecnología también han tomado la decisión de tener su equipo bien informado y capacitado. Es un costo adicional, pero la ganancia es que tendrán funcionando correctamente los procesos de su planta, lo que la hará más eficiente y redundará en ganancias.
En general, en el sector industrial los fabricantes de tecnologías deberían discutir ese reto y tomar ciertas acciones para poder facilitar la implementación de dichas tecnologías en países de América Latina. En la actualidad, hay muchas industrias que las han adoptado; aunque las compañías fabricantes se mueven individualmente. Por ello, han surgido organismos que promueven la adopción de refrigerantes naturales y pueden ser un conducto para unir a la industria y poder enfrentar esos retos y dar solución a la falta de operadores calificados.
Manejar el CO2 no es complicado como los técnicos de refrigeración comercial piensan o como se les ha hecho creer. Lo importante es formar buenos hábitos y ser muy estricto en cómo operar ese sistema, ya que el CO2 tiene un punto de congelación más bajo a una presión atmosférica. Si un sistema llega a tener el punto triple, el CO2 se solidifica. Es cuestión de informarse y aplicar las buenas prácticas.
En Europa sí hay personas capacitadas, pero en algún momento también se enfrentaron a la etapa de no tener técnicos informados ni capacitados. La industria se unió, colaboraron con universidades y lograron el éxito. Algo similar se tendría que hacer en América: unir a la industria y promover la tecnología en las escuelas especializadas. Por ejemplo, China, considerada un mercado emergente, ha cambiado su panorama con el uso de refrigerantes naturales. Aproximadamente existen 15 mil sistemas que utilizan amoniaco y CO2, cantidad que se espera que aumente al finalizar el 2015. Se estima que en América Latina esa adopción se vea en cinco años.
[author ]Hernán Hidalgo
Ingeniero Mecánico por la Universidad Nacional de Colombia. Tiene una maestría en Administración de Empresas por la Universidad de Newcastle upon Tyne, de Reino Unido. En la última década, ha ocupado el cargo de Sales manager for Industrial Refrigeration, Valves and Controls en Danfoss para América del Norte. Actualmente es Global Business Development manager en Danfoss Industrial Refrigeration, donde promueve soluciones clave con refrigerante CO2 en la refrigeración industrial.[/author]
2 comentarios
Es Información muy Importante para quienes nos dedicamos a la Refrigeración. Dónde puedo obtener Capacitación Técnica para el Uso del CO2.
He tenido capacitación en equipos domésticos con el uso de CO2 a través del PNUD y quisiera recibir mas capacitaciones, laboro en una institución de formación profesional y como consultor.