Realizar gráficas de consumo de energía, ubicar fallas o alertar sobre problemas en el suministro de aire son algunas de las actividades de un BAS. No obstante, si no se cuida la programación que tiene o se ignoran las alertas que proporciona, puede presentar algunas fallas
Gerardo Sánchez
[dropcap]L[/dropcap]os sistemas de automatización de edificios (BAS, por sus siglas en inglés) ofrecen numerosas ventajas en edificios comerciales, incluyendo un rendimiento eficiente, mejorado y práctico. Además, facilitan la operación de este tipo de espacios en el día a día y mejoran el control de sistemas de construcción y optimización del confort de los ocupantes.
Hay que observar que pueden surgir algunos problemas con la automatización de edificios que, de no ser localizados o reparados, pueden resultar en una menor eficiencia del sistema, un aumento de costos de operación y quejas de los ocupantes del inmueble.
Seguir algunos consejos y aplicar las mejores prácticas, ayudará a mitigar estos problemas y mantener la optimización del BAS para un rendimiento eficiente y efectivo:
[highlight]1. Cambios de consigna y desprogramaciones del sistema.[/highlight] Se recomienda eliminar puntos de ajuste originales y adecuarlos al propósito del diseño del edificio, así como programar el sistema de acuerdo con las instalaciones que se tienen. A pesar de ser un aspecto que se puede obviar, no ajustar estas características es uno de los problemas más comunes que obstaculizan el desempeño eficiente del inmueble.
Se debe cuidar que usuarios u ocupantes del edificio no manipulen el sistema, ya que si no regresa a su configuración ideal, puede ser perjudicial para varios de sus espacios. Esto podría contribuir a enmascarar otros problemas del edificio, como un sensor en mal funcionamiento.
Al igual que un coche nuevo, un BAS que es optimizado en la instalación puede perder impacto con el tiempo, si no tiene un mantenimiento adecuado. Problemas derivados de las desprogramaciones pueden ser remediados fácilmente, pero las personas quizás ignoran que una variación afecta al sistema completo.
Hay varias reparaciones para solucionar este problema. Medidas de seguridad, como el uso de un Personal Identification Number (PIN) para tener acceso por usuario y realizar cambios en el sistema, pueden ayudar a controlar las desprogramaciones.
La mayoría de las soluciones BAS también ofrecen la habilidad de programar atajos de ajuste, como un rango de 20 a 23 °C para áreas específicas, con el fin de asegurar que cualquier cambio que se realice no salga de los parámetros establecidos. Muchos BAS cuentan con una función programada, que regresa automáticamente a la configuración original después de un periodo de modificación temporal.
[highlight]2. Problemas mecánicos en el edificio[/highlight]. Un BAS puede proveer información o alertas que muestran cuando hay un problema mecánico en el edificio, pero, por lo general, no puede solucionar el problema. Por tanto, es importante monitorear el rendimiento del sistema y buscar anomalías o problemas en un edificio, que puedan enmascararse uno al otro.
Para mayor claridad sobre este punto se puede ver que, a menudo, los ductos son los últimos en ser instalados en un edificio y pueden no estar optimizados para el flujo de aire y entregas al espacio. Un BAS puede ser programado para hacer que el aire llegue de manera eficiente a un espacio determinado, sin embargo, el diseño del ducto puede obstaculizar al aire. La información del sistema de automatización de edificios puede, entonces, mostrar que el espacio no está enfriando de manera correcta y, por tanto, alerta sobre los ajustes mecánicos que se requieren para corregir el problema.
Muchos BAS pueden ejecutar reportes para buscar desprogramaciones u otros problemas. Si hay alguna alerta o alarma de una pieza específica del equipo, es importante buscar los ajustes originales y algún posible cambio en ese equipo que ayude a determinar lo que está causando la falla. Al asegurarse de que el equipo es restaurado a su estado óptimo, se ayuda al administrador del edificio a determinar si hay un problema adicional que lo mantenga fuera de operación o si este equipo puede ser operado.
Un técnico que tiene familiaridad con el edificio y sus sistemas es, también, capaz de solucionar estos problemas, y si se apoya en el sistema será más rápida la solución a la falla.
[highlight]3. Ser consciente del desgaste del sensor.[/highlight] Los sensores pueden tener fallas con el tiempo, por lo que es importante controlar las alertas de frío y de calor, así como compararlos con la información que el BAS provee acerca del rendimiento del edificio y sus sistemas. Ante esta situación, la mejor acción es reemplazar el sensor.
Las quejas de los ocupantes pueden ser el primer indicador de un sensor defectuoso. El BAS puede indicar que la temperatura del área es de 21 °C, mientras que sus ocupantes pueden sentir mucho más calor, resultado de un mal funcionamiento del aparato, que reporta información errónea.
En estas situaciones, puede usarse otro sensor para verificar la temperatura del espacio y determinar si el primero está mal. Frecuentemente, es una reparación sencilla, sin embargo, se debe verificar el funcionamiento del sistema, una vez que se determine qué BAS está leyendo la información del instrumento afectado.
[highlight]4. Vigilar los indicadores. [/highlight]Factores de alto consumo de energía y el incremento de quejas de los ocupantes acerca de la temperatura anormal son indicadores para revisar el BAS.
[toggle title=”Clave para obtener el máximo provecho de un BAS” state=”close” ]Con BAS, los usuarios pueden integrar múltiples sistemas en los edificios e inmuebles, como calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC, por sus siglas en inglés), iluminación, agua y seguridad, entre otros, con el fin de ser administrados y ajustados a través de una interfaz para maximizar el rendimiento de la construcción. La clave para obtener el máximo provecho de un BAS es asegurar que está optimizado para un edificio y aplicación específica, durante y después de su instalación.[/toggle]
Manteniendo un BAS optimizado
Siguiendo las mejores prácticas de instalación y configuración de un BAS, se asegura el rendimiento optimizado en el sistema. Colocar los sensores lejos del generador de calor, por ejemplo, puede ayudar a proporcionar lecturas de temperatura precisas.
Utilizar tecnología inalámbrica en controles del edificio ofrece flexibilidad de instalación y fácil resolución de problemas durante la vida del BAS. Cuando un espacio del edificio necesita cambios de sensores inalámbricos, éstos pueden ser removidos y colocados fácilmente para mantener la exactitud de detección, sin la molestia y el gasto de adecuaciones en el inmueble.
Por otra parte, la tecnología de un BAS permite el uso de soluciones de administración de energía, proporcionando funciones como un monitoreo en tiempo real del consumo de energía relacionada con los datos de un edificio, análisis de energía y detección de fallos automáticos. Esto proporciona un enlace a servicios inteligentes adicionales, que hacen que sea más fácil monitorear la información y obtener métricas sobre el rendimiento y consumo de energía del edificio.
Una gráfica del consumo de energía del edificio, durante un punto de ajuste en el tiempo, puede ayudar a identificar cuándo y cómo es utilizada la energía y precisar un posible desperdicio. Este tipo de información puede proporcionar escenarios para mejorar su eficiencia energética y operacional.
[author ]Gerardo Sánchez
Ingeniero Mecánico Electricista por la Facultad de Ingeniería de la UNAM. Ha laborado en el área de Automatización de Procesos Industriales desde 1990, donde participó en proyectos de control supervisorio y adquisición de datos en Grupo Industrial Bimbo. En 1995 se integró a Trane, donde actualmente labora como gerente de Sistemas de Automatización de Edificios y Energía. Desde entonces ha realizado proyectos de automatización de sistemas de aire acondicionado para diversas industrias, como la alimenticia, de hospitales, de hoteles, de bancos, de comercios y en aplicaciones de interoperabilidad para edificios comerciales, procesos farmacéuticos y de autopartes.[/author]