SUMe cumple un lustro de arduo trabajo por un país más sustentable, no solamente con un compromiso de mejora al medioambiente, sino también con una firme tarea de educar acerca del tema y aumentar el número de participantes dentro de la asociación
Glenda López / Rubén Darío Betancourt, fotografías
En la segunda asamblea ordinaria del año, el Presidente de Sustentabilidad para México, Maestro José Luis Gutiérrez, recuerda los tiempos en que inició SUMe y rememora que los miembros fundadores comenzaron este proyecto debido a su inconformidad, idealismo y rebeldía, afrontándose a muchos riesgos, pero siempre con la bravura y convicción que los ha transformado en quienes son actualmente.
La celebración dio inicio con la presentación de los eventos realizados a lo largo del año, desde las capacitaciones y premiaciones, hasta los eventos en los que tuvieron presencia. La M. en C. Alejandra Cabrera, Directora Ejecutiva de SUMe, conmemora con gran alegría cada actividad realizada: “todas y cada una de ellas han sido un éxito total para nosotros”.
SUMe viene de `sumar´, pues el compromiso es hacer más grande esta familia de mejora sustentable para nuestro país”: José Luis Gutiérrez, Presidente de Sustentabilidad para México
La Directora Ejecutiva explica que están participando en legislación en materia de edificación sustentable, además de que difunden distintas herramientas de certificación para los edificios sustentables. Declara, también, que los proyectos del año cerraron satisfactoriamente, y otros continúan para el próximo año. Finalmente, hace hincapié en que una de las prioridades de SUMe es tener relación con todos los giros involucrados en el sector de la construcción.
“Al final del día, siempre es muy significativo que te reconozcan; el trabajo de los miembros conmemorados es voluntario, por ello decidimos aplaudir su esfuerzo y empeño en esta labor, es un aliciente para que sepan que vamos por buen camino, que el barco va viento en popa”, celebra.
Posterior a este último informe anual, se entregaron reconocimientos a los miembros que han estado tres y cuatro años con la asociación y por último quienes han caminado junto a SUMe en estos cinco años. “Siempre es necesario que haya una o varias personas dentro de cada organización, que sean paladines de este compromiso sustentable, que sean personas que lo hacen personal al interior de su organización y el resto de la asociación. Definitivamente el mundo es de personas y eso lo reconocemos en SUMe”, expresa el maestro José Luis Gutiérrez.
“En el fondo todo lo que implica sustentable, sostenible, verde, ecológico, etcétera, es que en algún punto personas de bien nos hemos dado cuenta que con un mal estilo de vida ponemos fecha de caducidad a la posibilidad de vida en el planeta; por ello estos cinco años hemos intentado (y lo seguiremos haciendo) revertir este impacto ambiental que daña desde una forma humana”, manifiesta.
Asimismo, celebra el hecho de que a lo largo de estos cinco años SUMe ha incrementado su número de miembros, y que cuenta con finanzas saludables que le permiten garantizar su operación durante un par de años y con una comunidad motivada y comprometida con la asociación: “Los nuevos proyectos estarán diseñados y replanteados de acuerdo con la realidad actual, tomando en cuenta los cambios globales que estamos viviendo”, finaliza José Luis Gutiérrez.
Alicia Silva, miembro de SUMe, expone que la sustentabilidad es más que un tema de tendencia, es una realidad que atañe a todos y “es el único futuro posible. Todos deberíamos incluir estos valores en los modelos de negocio. Uno de los errores más graves ha sido pensar que podemos sólo rociar la sustentabilidad en un portafolio de marketing; sin embargo, la sustentabilidad debe ser parte fundamental de nuestro negocio, convirtiéndose también en una estrategia financiera, pues hay muchos beneficios y valor agregado al ser una empresa responsable en materia socio-ambiental”.
Por otro lado, el Arquitecto Jorge López de Obeso recientemente reconocido como LEED Fellow por el U.S. Green Building Council, afirma que es muy positivo que la sustentabilidad también sea redituable, pues el desarrollo y aplicación de gran parte de ella está involucrada con las finanzas: “Es una oportunidad que debemos seguir explotando, nos convienen los proyectos financieramente sanos que puedan construir edificios verdes”.