La industria cárnica es un sector que ofrece grandes oportunidades de negocios, debido a la demanda de alimentos de alta calidad. Con el propósito de satisfacer estas necesidades, Danfoss brindó su experiencia tecnológica para que los procesos y sistema de refrigeración de la planta de carne de Grupo Lala superen cualquier exigencia
Danahé San Juan / Fotografías: cortesía de Danfoss
A finales del año pasado, México ocupó el sexto y séptimo lugar como productor de carne de res y de proteína animal a nivel mundial, respectivamente, con una producción de 1.9 millones de toneladas que representan 119 mil millones de pesos en valor, según datos ofrecidos por Francisco Gurría, coordinador general de Ganadería de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), durante la Expo México Alimentaria Food Show 2017.
Lograr que la industria cárnica mexicana tenga los mejores rendimientos con productos frescos y sanos es una ardua labor que requiere de mucho trabajo para garantizar la cadena de frío, desde el cuidado de los animales y su alimentación en granjas, hasta las condiciones en que se conserva la carne para que llegue a la mesa de los consumidores.
Con este afán, hace poco más de dos años, se llevó a cabo la reestructuración de la infraestructura de la planta de carne de Grupo Lala, ubicada en Tizayuca, Hidalgo, a través de un proyecto “llave en mano”, con soporte técnico y postventa, en el que participaron la filial en México de la empresa gala Clauger, como integrador de soluciones, y la multinacional Danfoss, que proporcionó la tecnología.
Roberto Badillo, gerente de ventas de Refrigeración Industrial de Danfoss México, recuerda que “los detalles técnicos se determinaron en conjunto con Clauger. Se comenzaron a hacer las propuestas y nosotros interveníamos para integrar nuestra tecnología a su ingeniería. Adicionalmente, ellos hicieron la revisión hasta que se llegó a la solución final”.
El reto principal en una planta de este tipo consiste en el mantenimiento de las temperaturas, lo cual está directamente vinculado con la calidad de los productos. Para esto, Danfoss intervino con la instalación de más de 1 mil 500 válvulas de refrigeración, 125 estaciones de válvulas ICF, 25 válvulas operadas por gas ICLX, 10 válvulas motorizadas ICM, entre otros componentes, a fin de “obtener mejoras en el costo de conversión de energía eléctrica en refrigeración, bajos costos de operación y mantenimiento, con una visión corporativa de conservar la capacidad de refrigeración de la planta”, comenta por su parte Rogelio Ruíz, gerente general de la planta de carnes frías de Grupo Lala.
Esta solución incorporó Unidades Manejadoras de Aire (UMAs) en el área de procesos y un sistema de refrigeración de planta, con el propósito de mejorar los métodos internos y la capacidad de refrigeración. Asimismo, se adquirieron Drives desde 22KW hasta 560KW, válvulas de amoniaco, de agua caliente y de freón, aplicaciones de acero inoxidable para el manejo de aire en la elaboración de quesos, soluciones de enfriamiento para las salas de proceso y reducción del costo de energía en el área de refrigeración industrial con sistemas de amoníaco.
Todo el servicio de refrigeración está centralizado en un solo sistema que es el que distribuye la refrigeración en la planta. Éste opera con amoníaco como refrigerante, uno de los más eficientes en la industria. La única desventaja es su toxicidad, entonces se debe tener mucho cuidado con las fugas; sin embargo, hay pocas opciones de refrigerantes naturales para la industria y el amoníaco posee una gran eficiencia y no tiene repercusiones ecológicas negativas, por lo que, en México, el 99 por cierto de las plantas de refrigeración industrial funcionan con amoníaco”: Roberto Badillo, gerente de ventas de Refrigeración Industrial de Danfoss México.
Instalación y Mantenimiento
La unificación de la marca permitió ahorros de 25 por ciento de tiempo en instalación, pero también económicos, ya que las soluciones de Danfoss permiten economizar en diferentes aspectos, por ejemplo, en soldadura, pruebas de soldaduras, soporte, viáticos, aislamiento, etcétera. “Clauger es una empresa que conoce muy bien nuestra tecnología, su principal reto fue avanzar en los tiempos exigidos por el cliente para la renovación de la planta. Nosotros ayudamos mucho en ese proceso con nuestros productos, asesoría durante el montaje para corregir problemas y para el personal. Hicimos varias visitas de campo durante la instalación, por cualquier problema o duda que pudiera haber, inclusive por si necesitaban ayuda en la calibración de los elementos. Trabajamos muy conjuntamente para que no se presentara algún retraso que pudiera afectar la instalación”, explica Roberto Badillo a Mundo HVAC&R.
En términos de mantenimiento, prosigue el ingeniero, lo primero que se debe atender es la puesta en marcha de la instalación; posteriormente, se hace la calibración y los ajustes para lograr las temperaturas adecuadas y necesarias. Es muy importante que tras 24 o 48 horas de la puesta en marcha, se haga una limpieza general de los componentes, principalmente de los filtros por ser los que retienen las impurezas del sistema. Badillo recomienda que este procedimiento se realice cada seis meses de manera preventiva para que la temperatura se mantenga en control, ningún área pueda resultar afectada y el sistema opere de forma segura.
Danfoss ofreció a Clauger un proyecto en el que se conjunto la experiencia y el conocimiento de más de 50 personas de sus diferentes divisiones. Ahora, la planta de Grupo Lala funciona con un refrigerante natural que no tiene una implicación ecológica y proporciona múltiples beneficios en cuanto a instalación y seguridad. La calidad de los productos y la satisfacción de la demanda de los consumidores fue tan sólo el resultado de unir tecnología de valor y la experiencia en una solución integral.