El aumento de la eficiencia energética es un enfoque clave que desde hace algunos años ha tomado fuerza. Y es que la mayoría de los sistemas HVAC están siendo diseñados con un fuerte énfasis en características orientadas a la automatización de edificios y el cumplimiento de estándares basados en cuestiones de sustentabilidad, es decir, que sean energéticamente eficientes y que esto se traduzca en una disminución de costos operativos.
Sin duda, esta tendencia cada vez toma más fuerza y es la que más está impactando a la industria, llevando a los fabricantes a contar con una oferta de equipos amigables con el medioambiente, pero que, al mismo tiempo, cuenten con equipos con un mejor rendimiento, generen menores costos operativos y cuenten con la calidad del aire y confort interior que se espera en inmuebles de uso comercial y residencial.
Una de las tecnologías que pueden cumplir con esto es la Inverter, la cual se caracteriza por adaptar la velocidad del compresor a las necesidades del lugar que se requiera climatizar y proporciona una mayor o menor cantidad de gas refrigerante a las diferentes áreas a acondicionar. Esto funciona porque el compresor envía sólo el refrigerante necesario para mantener la temperatura deseada, sin necesidad de hacerlo trabajar al 100 por ciento, manteniendo así la eficiencia y controlando los costos operativos.
Estos sistemas poseen la habilidad de autoajustar la velocidad y potencia del motor con base en la temperatura que se necesita por espacio y situación. Lo anterior, sin duda, conlleva a un mejor consumo de energía, tema que puede iniciarse a través de la reducción de costos operativos, pero que también implica promover una cultura y consciencia a favor del medioambiente.
Optar por un equipo que incorpore esta tecnología significa eficiencia, durabilidad y confort. La tecnología Inverter es hoy un gran avance en eficiencia e innovación, para crear equipos que puedan ser instalados como el sistema de climatización y control de temperatura principal de un edificio, o bien, como sistema complementario de los equipos HVAC, que además genera beneficios como: bajo nivel de sonido, ahorro de energía, gran rango de capacidad, aire interior más limpio, enfriamiento y calefacción para un alto nivel de desempeño y de eficiencia.
El informe SmartMarket 2016 World Green Building Trends ha demostrado que operar los edificios verdes cuesta 14 por ciento menos que los tradicionales, por lo que se espera que la demanda de construcción ecológica se duplique cada tres años.
Hoy en día, las opciones eficientes y ecoamigables se están haciendo más accesibles, sobre todo por los beneficios que generan tanto en edificios comerciales como en complejos residenciales; por otro lado, hoy el consumidor está más consciente del ahorro y consumo de energía, por lo que exige una tecnología más eficiente. Por ello, la industria continúa innovando y buscando nuevas formas de mejorar la calidad y el confort, al tiempo de fomentar la consciencia sustentable.
Jaime Jiménez
Ingeniero Civil con maestría en Administración de Empresas por el ITESM, con más de 27 años de experiencia. Desde marzo de 2012 es vicepresidente de Territorio México para Trane.