El Acuerdo de París de 2015 marcó un punto de inflexión en la campaña contra el cambio climático, ya que los líderes mundiales prometieron su apoyo para adoptar prácticas energéticas más limpias y sostenibles. Con los fenómenos climáticos a la orden del día, es el momento idóneo para optimizar las acciones de la industria para el éxito
Jean Pascal Tricoire
En su último informe, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) advirtió sobre los principales efectos negativos para la humanidad y el planeta si las temperaturas globales aumentaran 1.5 ºC por encima de los niveles preindustriales. Y si las temperaturas suben 2 °C por encima de esos niveles, alerta de consecuencias aún más dramáticas.
El reporte concluye que alcanzar emisiones netas cero de CO2 a nivel mundial para 2060 es de trascendencia crítica. Con un objetivo tan grande, y con la ventana para una acción decisiva cerrándose rápidamente, la viabilidad económica es esencial para el éxito de cualquiera de estos esfuerzos.
Siendo los sectores energéticos e industriales los principales contaminantes, es imperativo que se enfoquen en lograr emisiones netas cero sin depender de las compensaciones del sector del uso de la tierra. En mi opinión, esto es posible en las economías desarrolladas para 2050 y en las economías en vías de desarrollo hacia 2060.
Refinando la misión para el éxito
La Comisión de Transiciones de Energía (ETC, por sus siglas en inglés) es un grupo diverso de líderes y compañías del sector energético que están acelerando el cambio hacia sistemas de energía con bajas emisiones de carbono al tiempo que permiten un desarrollo económico sólido. Durante el último año, la ETC se ha dedicado a definir un camino hacia las emisiones netas cero de las industrias que más problemas presentan para llegar a esta meta. El resultado es el informe Misión posible: alcanzar la neutralidad en emisiones de carbono por parte de los sectores más difíciles de descarbonizar para mediados de siglo; sus hallazgos muestran que no sólo es posible tal cambio, sino que también
es asequible y potencialmente rentable. Las estimaciones actuales sugieren que, para mediados de siglo, el costo para la economía será inferior al 0.5 por ciento del producto interno bruto mundial, con un impacto insignificante en los estándares de vida del consumidor.
Con el lanzamiento de Misión Posible, se ha demostrado que esta transición es posible de lograr mediante la innovación acelerada y la inversión con un costo mínimo para la economía global, a través de políticas ambiciosas. Se basa en el reporte Better Energy, Greater Prosperity (2017), y profundiza en los sectores considerados hoy en día como “difíciles de descarbonizar” sólo a través de la eficiencia energética y la electrificación.
A medida que el mundo se vuelve más electrificado y la electricidad se descarboniza, la importancia de estos sectores crece para alcanzar la descarbonización total de la economía mundial hacia el 2060.
Vías para limitar el calentamiento global a menos de 2 °C
Better Energy, Greater Prosperity
- Descarbonizar la generación de energía, casi en su totalidad, y la electrificación de un conjunto más amplio de actividades
- Fortalecer las políticas públicas y hacer inversión a gran escala para la descarbonización de actividades, particularmente, en la industria pesada, que no puede ser electrificada
- Revolucionar el ritmo de mejora de la productividad energética
- Optimizar el uso de combustibles fósiles
El camino hacia las emisiones netas cero
Better Energy, Greater Prosperity expone todas las rutas de descarbonización del suministro de energía y materia prima. Incluye un análisis exhaustivo de la electrificación, y de alternativas como la bioenergía de hidrógeno. También proporciona un análisis cuantificado de las principales ventajas y limitaciones dentro de cada sector, así como una revisión de la competitividad de los costos. Esto conduce a una exploración definitiva sobre cómo gestionar la transición a las emisiones netas cero para estas industrias pesadas.
A diferencia de la mayoría de los informes convencionales, éste también examina cómo optimizar la demanda para mitigar el impacto de los sectores “difíciles de eliminar” dentro del presupuesto de carbono. Si bien la eficiencia energética sigue siendo un factor clave, los nuevos modelos económicos, como los cambios modales de transporte y la economía circular, tendrán un papel importante en estos sectores. En los próximos años, también se presenciarán muchos avances con tecnología de baterías, electro y bioquímica, nuevos materiales y diseño de servicio eficiente: todos con un gran potencial para alterar significativamente el panorama de oportunidades.
La pieza final del rompecabezas incluye a los políticos, los inversores, las empresas y los consumidores, es decir, los responsables de acelerar este cambio.
La sección final del documento analiza las recomendaciones para la adopción de políticas, específicamente, la migración impulsada por el clima, la eficiencia energética, la gestión de la demanda y la descarbonización de la energía, y describe el papel del sector privado en esta transición.
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Jean Pascal Tricoire
CEO y presidente de Schneider Electric; presidente de Global Compact en Francia y miembro del Consejo del Pacto Mundial de Naciones Unidas; integrante de la Comisión de Transiciones de Energía.