Con una envolvente de doble capa de acristalamiento con vidrio Low-E de baja emisividad, esta torre es un ejemplo de diseño inteligente y sustentable
Ubicada en el corazón de la Ciudad de México, en la emblemática Glorieta de los Insurgentes, la envolvente de esta torre de 120 metros de altura consiste en una doble capa de acristalamiento con vidrio Low-E de baja emisividad. Además de permitir la entrada de luz natural, esta solución ayuda al edificio a bloquear la ganancia térmica y recibir poca radiación. Lo anterior reduce el uso tanto de aire acondicionado como de iluminación artificial. Resultado: 59 por ciento de ahorro de energía, en cumplimiento con la NOM-008-ENER-2001.