De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la actividad industrial en México registró una caída de 25.7 por ciento en el segundo trimestre del año a causa de la pandemia, el confinamiento, el desplome en la inversión y la disminución en la demanda de bienes y servicios.
Como parte de la estrategia sanitaria, el gobierno federal declaró a algunas actividades productivas como no esenciales; sin embargo, la industria química quedó excluida de dicha restricción por su impacto en la vida cotidiana y ser eslabón para el funcionamiento de otros sectores.
Dentro de esta industria se encuentra la empresa Chemours, la cual se mantuvo firme atendiendo con insumos y materia prima vital a diversos sectores: minería, telecomunicaciones, automotriz, energía, salud y, por supuesto, HVACR. En este último, la tecnología de Chemours ha resultado un insumo vital para mantener temperaturas óptimas en instituciones médicas, hospitalarias y de medicamentos.
Con sede en Delaware, Estados Unidos, la compañía recientemente obtuvo la certificación de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) para una de sus soluciones desinfectantes, por su efectividad contra el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la covid-19.
Redacción