Fotografía superior. Según estudios de laboratorio, la ionización bipolar puede inactivar el material vírico del SARS-CoV-2 hasta en un 99.4 por ciento en un lapso de 30 minutos en un laboratorio.
A más de medio año de la declaración de la pandemia de coronavirus, la industria de la climatización y el aire acondicionado sigue adelante con la búsqueda de soluciones que contribuyan a reducir el riesgo de contagio. Con el propósito de dar a conocer aspectos de los sistemas HVAC y del diseño de ventilación para garantizar entornos favorables para la comodidad y el confort climático de las personas, el Capítulo Ciudad de México de ASHRAE llevó a cabo la sesión técnica “Aire acondicionado en ambientes hospitalarios y espacios comerciales”, la cual estuvo a cargo de David Schurk, gerente nacional de Cuentas Estratégicas de Atención Médica en Carrier West.
Para comenzar, el especialista señaló la importancia de brindar seguridad a las personas a través de las soluciones tecnológicas que existen en el mercado. También mencionó la necesidad de garantizar la calidad del aire en las edificaciones. Para esto aseguró que los sistemas HVAC equilibrados serán los que ayuden a conseguir esa seguridad. Asimismo, afirmó que hay otros factores que se deben tomar en cuenta como intercambio de aire, cantidad de aire exterior, filtración y la aplicación de clasificaciones MERV, limpieza de aire exterior e interior, entre otras.
El distanciamiento social es un aspecto que no se debe perder de vista, pues la exposición a los aerosoles que las personas emiten al respirar, hablar o estornudar conllevan un gran riesgo de contagio. Los sistemas HVAC son un gran aliado para combatir estas diminutas partículas y el material vírico en ellas. Una de las soluciones es la ionización bipolar, la cual consiste en la liberación de iones cargados en el aire interior que interactúan y eliminan los contaminantes en el aire. Hay diferentes tipos de ionización: bipolar de punta de aguja por descarga de corona (BPI), por tubo de plasma de descarga de corona (CDT) y sistemas de descarga dieléctrica (DBD), entre otros. Con la tecnología de ionización se pueden eliminar los patógenos vivos del ambiente, ya que se rodea la membrana del virus y se extraen las moléculas de hidrógeno. De este modo, se elimina su capacidad de reproducción, reduciendo así el riesgo de contagio. La ionización sirve para regular no sólo el ambiente interior, sino también los sistemas HVAC. La ionización bipolar se puede aplicar, por ejemplo, en los serpentines que normalmente son oscuros y húmedos, los ventiladores, los ductos, etcétera. Estudios específicos con el SARS-CoV-2 han demostrado que la ionización bipolar puede inactivar el material vírico hasta en un 99.4 por ciento en un lapso de 30 minutos en un laboratorio.
El experto también habló sobre el estándar 170 de ASHRAE para ventilación de instalaciones sanitarias, técnicas de diseño integral, buenas prácticas y la norma ASHRAE 62 sobre ventilación para una calidad de aire interior aceptable.
Por último, Schurk recomendó la ventilación constante de los espacios interiores y destacó la necesidad de crear nuevas tecnologías sanas y sólidas, así como construcciones de ambientes interiores sanos para que la gente tenga la confianza de ingresar a un inmueble. Una manera de proporcionar esta confianza podría ser a través de calcomanías con códigos QR que brinden información sobre las acciones que se han realizado en el espacio en cuestión para garantizar que el edificio no esté enfermo.
Danahé San Juan