Para el líder de Johnson Controls México la interconectividad de los sistemas y la inteligencia artificial representan un salto cualitativo para la eficiencia energética de las edificaciones y, claro está, de la industria HVAC. Conoce su perspectiva de ambos negocios y los desafíos que les esperan a raíz de la pandemia de la covid-19
Danahé San Juan / Fotografías: cortesía de Johnson Controls México
Con la llegada del nuevo milenio, en medio del auge del sector automotriz en la región del Bajío, las industrias de la edificación inteligente y HVAC vieron despuntar la trayectoria de un joven y talentoso ingeniero que a la postre se convertiría en uno de sus principales expertos: Santiago Echeveste, hoy vicepresidente y gerente general para Johnson Controls México: “El arribo de General Motors detonó la instalación de otras plantas periféricas a esta armadora. En esa época hubo muchísima actividad en ese sector y la zona tuvo un gran potencial a inicios de la década del 2000”, rememora Echeveste en entrevista exclusiva para Mundo HVAC&R.
Después ingresó a las filas de Comercial Mexicana como gerente de mantenimiento y responsable de ahorro energético. Ahí, se ocupó de integrar las áreas de mantenimiento y construcción para que todas las tiendas se construyeran bajo el eje rector de la sustentabilidad: “Buscábamos poner materiales aislantes, equipos de alta eficiencia, iluminación, nuevas tecnologías para tener costos operativos bajos y ser amigables con el medioambiente. Implementamos sistemas de captación de agua, reciclaje y tratamiento. Durante ese proceso fui el responsable de diseñar, instalar y mantener todas las instalaciones electromecánicas en todas las sucursales. Era el responsable de la compañía”.
Más tarde se unió al equipo de Alsea como encargado de mantenimiento corporativo de las unidades de negocio del grupo. También se encargó de la división de aire acondicionado comercial en una importante empresa surcoreana. De aquella experiencia recuerda el éxito de la implementación de los sistemas VRF, una tecnología asiática que tenía un crecimiento anual del 30 por ciento.
“El principal reto fue educar a los clientes y entrenar a los contratistas acerca de las virtudes de los sistemas VRF”, destaca el ingeniero mecánico electricista con un posgrado en Administración de Empresas, así como diversos cursos en aire acondicionado y refrigeración.
Finalmente, en diciembre de 2012, se incorporó a Johnson Controls México donde tras ocho años y diferentes posiciones llegó al puesto de liderazgo que hoy representa.
“Se ha demostrado que los edificios son responsables de más del 30 % del consumo energético a nivel mundial. Por eso hay que enfatizar la eficiencia de los sistemas HVAC porque son uno de los grandes consumidores de energía dentro de una edificación”
Mundo HVAC&R (MH): ¿Cuáles han sido los principales desafíos que ha enfrentado como líder de Johnson Controls México?
Santiago Echeveste (SE): Han sido varios. Por ejemplo, en el tema de las fusiones, cuando adquirimos la parte de AA comercial de Hitachi me tocó colaborar para diseñar la estrategia de productos VRF, sobre todo. La fusión con Tyco también me tocó, pero definitivamente el reto más grande que he tenido en mi carrera ha sido guiar el destino de la empresa en medio de esta pandemia.
MH: ¿Cómo ha evolucionado la industria de la climatización en México?
SE: Inició como un tema de confort y con el tiempo se ha enfatizado la eficiencia energética y la calidad del aire interior [CAI]. Se ha demostrado que los edificios son responsables de más del 30 por ciento del consumo energético a nivel mundial. Por eso hay que enfatizar la eficiencia de los sistemas HVAC porque son uno de los grandes consumidores de energía dentro de una edificación. La industria ha evolucionado, siempre ha buscado una mejora en la eficiencia de los equipos y en tener un menor impacto en el medioambiente con el tema de los refrigerantes. En cuanto a la CAI cada vez hay estándares más exigentes y con la pandemia este punto tomó más importancia, tener aire desinfectado y libre de patógenos. Hoy, los equipos trabajan y están interconectados. Está el internet de las cosas [IoT], máquinas hablando con máquinas que generan inteligencia artificial [IA], que no es más que recopilar datos, tendencias y comportamientos para que por medio de un algoritmo, los equipos tomen decisiones para eficientar su uso o facilitar el mantenimiento predictivo. Nosotros tenemos una gran cantidad de chillers conectados globalmente que monitoreamos en tiempo real. Eso nos ha permitido generar una gran base de datos donde vemos que si ciertos parámetros del equipo se salen, es un indicativo de que en cierto tiempo puede ocurrir una falla o un problema. Entonces, vamos y atacamos ese problema de manera proactiva.
MH: ¿Qué avances ha experimentado la ingeniería mexicana con respecto al IoT y la IA?
SE: El IoT y la IA siempre deben ir de la mano de una infraestructura. En México, sin embargo, apenas se están poniendo las primeras redes 5G. Al final, el IoT habla de una mayor cantidad de equipos interconectados que comparten datos entre sí para generar información para la toma de decisiones. Estamos detrás de países como Brasil y Corea del Sur. En cuanto a la adopción de esta tecnología ocupamos el lugar 18 en una muestra que se hizo en 24 naciones donde se midió la cantidad de dispositivos conectados. Solamente el 6.5 por ciento de la población mexicana tiene equipos conectados a la red. Tenemos una gran área de oportunidad, pero debe ir de la mano con el desarrollo de infraestructura, la disponibilidad en más zonas y mayor acceso a internet.
MH: ¿Qué innovaciones tecnológicas ofrece la compañía para la industria HVACR?
SE: Tenemos equipos de gran eficiencia. El último fue nuestro Chiller YZ con rodamientos magnéticos y refrigerantes de baja presión. Acabamos de lanzar nuestra plataforma OpenBlue en la que unimos todas nuestras tecnologías para generar soluciones interconectadas hechas a la medida para los distintos verticales que atendemos y generamos programas, técnicas de operación y mantenimiento que hagan sentido para esos verticales. Adicionalmente, en cuanto a nuestras últimas innovaciones tecnológicas para el control de acceso, seguridad y protección contra incendio, hemos desarrollado sistemas de control de acceso inteligentes frictonless con el objetivo de minimizar el contacto por medio de reconocimiento facial para edificios. También desarrollamos sistemas de detección de temperatura por medio de cámaras capaces de detectar variaciones de calor de las personas en espacios de alto tráfico. Sumando a esto contamos con un sistema de tratamiento, desinfección y monitoreo de la calidad del aire AtmosAir. Estos desarrollos contribuyen a crear espacios más seguros, sostenibles y conectados, para afrontar la nueva realidad.
MH: Desde su punto de vista: ¿Cuáles han sido las principales afectaciones de la pandemia en la industria de la edificación?
SE: El sector fue fuertemente golpeado, primero por el cierre de actividades y después por la baja demanda de espacios. La pandemia ha generado nuevos paradigmas. La gente ya no está yendo a trabajar a las oficinas, por lo que vemos que la demanda de espacios comerciales para la renta de oficinas va a disminuir. En el tema del comercio también hubo afectaciones porque la gente dejó de ir a los centros comerciales como una forma de entretenimiento. Si bien tenemos perdedores como la edificación comercial y de oficinas, también tenemos ganadores. Ahora todo el mundo está conectado, entonces la demanda de data centers va a incrementarse y todo lo relacionado con la cadena de suministro y logística. Vemos un crecimiento en centros de distribución, posiblemente no grandes, pero sí de los pequeños y los cercanos al punto de consumo.
MH: ¿Cuáles serán las tendencias en equipamiento para confort climático, seguridad y gestión de edificios?
SE: En primer lugar serán los inmuebles conectados para que se pueda comparar el desempeño de tu edificio contra otros que también generen información para un mejor manejo de la urbe. Esto es parte del manejo de las ciudades inteligentes. Por ejemplo, hay una empresa que puede sacar información de los elevadores y con base en eso llamar a un servicio de taxis a través de una aplicación para que estén en el punto correcto cuando la gente salga del edificio. Otra tendencia es la calidad y limpieza del aire, es decir, aire libre de patógenos, sistemas de control de acceso frictonless y también una menor ocupación de los edificios. Si antes se metían 50 personas por cada 200 metros cuadrados, ahora con el coronavirus posiblemente sólo se puedan meter 25. La densidad va a cambiar. No sabemos si habrá otro virus después, por lo que esto está dejando mucho aprendizaje en la forma en que se pensaban las oficinas y el diseño.
MH: ¿Cómo integra la empresa el tema de la sustentabilidad y el cuidado ambiental en el desarrollo de productos?
SE: Es el eje rector de Johnson Controls. Nuestra misión: lograr un mundo más sustentable y seguro para nuestros clientes. A finales del siglo antepasado, Johnson Controls nació con la invención del termostato. En ese entonces, aparte de una gran mejora en el confort, implicó un ahorro brutal de la energía porque en esa época no había un control para los sistemas de temperatura. Además, ese invento ayudó al crecimiento de los rascacielos y de las edificaciones de grandes superficies porque ya ibas a poder tener el control de la edificación. A través del tiempo la empresa ha seguido innovando, se ha retado a sí misma, primero desarrollando productos más eficientes y también en nuestras mismas instalaciones, reduciendo nuestra huella de carbono, firmando actas y participando en programas de la ONU para la reducción de emisiones. Para el 2025 tenemos un reto muy importante de reducción de emisiones en nuestras instalaciones. Nuestro corporativo en Glendale, Estados Unidos, fue el primero que obtuvo la certificación LEED Platino. Ese conjunto de edificios fue como un showroom para mostrarle al mundo lo que se puede hacer. Cuenta con paneles solares, recuperación de energía. Todas las soluciones que desarrolla Johnson Controls las volcó en ese corporativo y, además, las está aplicando en sus otras instalaciones para tener un impacto cero.
MH: ¿Cuáles son las características que debe tener un líder?
SE: Tiene que ser muy empático con su equipo de trabajo. Debe saber tomar decisiones y para eso debe escuchar diferentes puntos de vista. Un líder está para servir y no para ser servido. Yo estoy agradecido con mi equipo y el liderazgo que me rodea porque entre todos hemos trabajado para proteger a toda la familia de Johnson Controls y también a nuestros clientes durante esta pandemia que, además, no tenemos certidumbre de cuándo va a concluir.
MH: ¿Qué acciones implementa para dirigir a sus colaboradores hacia el cumplimiento de los objetivos?
SE: Primero me aseguro de que mi equipo directivo tenga claros los objetivos de la empresa. Lo que hago es ser un facilitador. Doy seguimiento al avance de forma semanal y si hay alguna cuestión, una piedra en el camino que haya que remover, es donde intervengo. Soy un líder que fija una dirección, deja al equipo trabajar y estoy a su disposición para ayudarlos a resolver cualquier problema que interfiera en el alcance de las metas.
MH: ¿Cuáles son sus fortalezas como líder y cómo las aplica?
SE: Me gusta trabajar cerca de la gente. Trato de tener one&one con mis colaboradores de manera periódica para ver cómo van en lo personal, en el tema de los objetivos y ver en qué los puede ayudar. Soy una persona que da seguimiento puntual a las cosas, así que mi equipo sabe que semanalmente habrá una reunión para revisar los avances. Otra cosa que me caracteriza es que soy accesible. Siempre estoy a un correo electrónico o a una llamada de distancia.
MH: ¿Tiene un lema o filosofía de vida?
SE: Ser constante. Hay una frase que afirma que el éxito es un 80 por ciento perseverancia y un 20 por ciento inteligencia. Entonces hay que trabajar, tener las metas claras, ser constantes y perseguir nuestros objetivos.