A dos años del inicio de la pandemia de covid-19 puede vislumbrarse la reactivación de la actividad económica, incluyendo las operaciones de comercio exterior. Para las empresas es lógico priorizar los procesos diarios para dar continuidad al flujo de efectivo que las mantiene a flote. En este contexto, es importante prestar atención al cumplimiento de las obligaciones inherentes, además de implementar cuatro prácticas de comercio internacional que enumeramos a continuación:
1. El cumplimiento aduanero y fiscal.
La recuperación económica también se manifiesta en la actividad de las autoridades fiscales. Según el Informe tributario y de gestión del tercer trimestre de 2021 del Servicio de Administración Tributaria, se presentó un incremento considerable en la recaudación de contribuciones de comercio exterior, de enero a septiembre de 2021. En este sentido, el retorno de la inversión por cada peso invertido en fiscalización fue de 141.50 pesos. Por lo tanto, es esencial contar con los recursos necesarios y controles eficientes para un cumplimiento aduanero y fiscal efectivo. Esto con el fin de evitar multas, suspensiones y cancelaciones del padrón de importadores del Programa Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX), el Programa de Promoción Sectorial (Prosec) o la certificación del impuesto al valor agregado (IVA). Asimismo, las empresas deben actualizarse y asesorarse adecuadamente con respecto a las obligaciones de comercio exterior, ya que esta materia tiene cambios constantes a lo largo del año.
2. Validación de expedientes. La aceleración del uso de tecnología y el trabajo a distancia por parte de importadores, exportadores y algunos proveedores de servicio han convertido la validación y resguardo de expedientes en un aspecto prioritario. Si bien los expedientes de comercio exterior ya se manejaban de forma electrónica, es necesario verificar que se encuentran completos y protegidos en el servidor de la compañía, además de tenerlos en correos electrónicos o en medios externos de almacenamiento.
3. Actualización de cambios de personal. Una de las obligaciones del IMMEX es notificar a la Secretaría de Economía sobre los cambios de sus socios, accionistas y representantes legales. Por ello, las empresas que cuenten con certificación del IVA deben presentar el aviso correspondiente ante ventanilla digital durante el mes inmediato siguiente a la modificación de colaboradores que cuenten con facultades para actos de dominio o integrantes de la administración. Ignorar este proceso puede resultar en el incumplimiento del IMMEX y de la certificación de IVA, cuyo efecto podría ser la suspensión o inclusive la cancelación de éstos.
4. Actualización de domicilios. De acuerdo con el estudio Perspectivas de la Alta Dirección en México 2022, elaborado por KPMG, el 49 por ciento de las empresas encuestadas mantendrán el trabajo en sus instalaciones, mientras que un 28 por ciento seguirán con sus labores a distancia. Además, el 54 porciento ya implementó alguna estrategia inmobiliaria, ya sea modificando la cantidad de espacios rentados, haciendo uso de espacios colaborativos o esquemas flexibles de arrendamiento.
Por lo anterior, es importante actualizar la información de los domicilios en el registro federal de contribuyentes y en las autorizaciones de comercio exterior correspondientes. Asimismo, para mantener el padrón de importadores activo, es requisito que el domicilio tenga estatus de localizado; de lo contrario, pudiera ser suspendido e, incluso, cancelado. Esto también es aplicable a las autorizaciones de programas como el Prosec, el IMMEX o esquema integral de certificación, sobre todo si el cambio de domicilio se realiza en los lugares donde se mantiene mercancía de comercio exterior o se presta el servicio autorizado, según corresponda.
Hoy en día, las organizaciones operan en una realidad de constante cambio. Estos desafíos impactan la continuidad de la cadena de suministros, por lo que es necesario atender estas cuatro prácticas de comercio internacional, buscando procedimientos establecidos para mantener el cumplimiento y evitar sanciones o situaciones que pudieran poner en mayor riesgo la operación del negocio.