El Día Mundial de la Eficiencia Energética es una fecha que sirve para reflexionar sobre la importancia del uso eficiente de la energía en las actividades diarias, en la búsqueda de fomentar un consumo responsable y crear conciencia sobre su impacto en el medio ambiente.
Buscar tener una eficiencia energética trae consigo múltiples beneficios tanto en las cadenas de producción, como en la operación de cualquier inmueble; por ejemplo, edificios eficientes requieren menos energía para funcionar, por lo que el consumo de energía es menor, reduciendo a su vez las emisiones de carbono.
Por esta razón, una de las estrategias para la eficiencia energética es la consolidación de ciudades inteligentes.
La Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía define a las ciudades inteligentes como aquellas que crean edificios sustentables, que incorporan en su diseño características que los hagan entornos y espacios agradables para los usuarios (tanto al exterior como al interior), económicamente menos costosos y ambientalmente amigables, gracias a tecnologías que permitan reducir el uso de recursos como la energía y el agua.
Los encargados del desarrollo de ciudades inteligentes, probablemente ya conocen la importancia de la eficiencia energética en la infraestructura de los edificios; sin embargo, no saben cómo hacerlos viables desde el punto de vista económico.
Para Trane, compañía global de aires acondicionados enfocada en crear ambientes interiores cómodos y energéticamente eficientes para aplicaciones comerciales y residenciales, existen al menos 3 formas en que la modernización de la infraestructura de las ciudades puede ayudar a construir una comunidad verdaderamente sustentable, resiliente y próspera a largo plazo.
1. Mejores edificios brindan beneficios económicos
¿Sabía que más del 40% del consumo energético a nivel mundial está destinado a brindar edificios confortables y bien iluminados?
Un primer paso para la mayoría de las ciudades puede ser la modernización de la infraestructura de sus edificios, con el fin de mejorar la eficiencia en cuanto a consumo de energía eléctrica, y de esta forma contribuir a reducir los costos generales de operación de los edificios.
A medida que esta reducción de costos genere ahorros en las facturas, se puede reasignar este presupuesto para financiar futuras inversiones que mejoren la calidad del aire interior, la automatización o el confort en general de los ocupantes.
2. Modernizarse aprovechando los ahorros energéticos
¿De qué forma pueden aprovecharse los ahorros energéticos y operativos de los edificios para el desarrollo de ciudades inteligentes y sustentables?
A través de un plan de ahorro de energía, edificios y ciudades inteligentes alrededor del mundo, se pueden financiar proyectos de mejora y modernización de instalaciones utilizando ahorros de energía futuros.
“Hoy existe tecnología para ciudades inteligentes en las que se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero a través de la aceleración de tecnologías de energía limpia. Por ejemplo, con el desarrollo de nuevas y mejores formas de calefacción de edificios como la electrificación, adoptar sistemas de automatización de los equipos de aire acondicionado dentro de los edificios, así como incluir productos de próxima generación”, comentó Carlos García, Director General de Trane México.
De esta forma, la modernización de la infraestructura de los edificios se vuelve mucho más factible, ya que no representa un gasto extra sobre el presupuesto, mientras se obtienen beneficios económicos y de sustentabilidad durante el proceso.
3. Mejorar los objetivos de sustentabilidad de los edificios
La forma más fácil de acelerar la acción climática para compensar las emisiones de carbono es incorporar la descarbonización, la conservación del agua y la eficiencia energética en la infraestructura de los edificios.
Todo comienza por compensar las emisiones de carbono de un edificio modernizando las instalaciones con sistemas y equipos HVAC eficientes; posteriormente reemplazar los sistemas HVAC que utilizan combustibles fósiles con soluciones eléctricas, así como ayudar a reducir los desechos mediante la incorporación de automatizaciones de edificios, que reducen el uso de energía durante las horas de menor actividad.
Para aquellos que buscan dar un paso más, se puede hacer la transición de las instalaciones para depender de energía limpia y renovable, lo que ayudará a reducir aún más las emisiones de carbono.
“Diferentes comunidades de todo el mundo han sido testigos de lo importante que son la sustentabilidad y la descarbonización para las economías locales. En 2022, Trane realizó un proyecto de renovación de equipos HVAC en diferentes edificios gubernamentales de Nuevo México, Estados Unidos; lo que logró una compensación de más de 7,400 toneladas métricas de CO2 y conservar 5 millones de galones de agua mientras ahorran más de 1 millón de dólares cada año”, explicó Carlos García.
Reducir las emisiones de carbono en las operaciones es un compromiso para muchas empresas. Trane, por su parte, lanzó su compromiso de Sustentabilidad en el que a través de mejorar la eficiencia energética de sus sistemas, busca ayudar a sus clientes a reducir un Gigatón de toneladas métricas de emisiones de carbono para 2030.
“Para Trane es importante que las organizaciones y gobiernos piensen desde la innovación para contar en un futuro con un planeta más saludable. Los desafíos globales inspiran un pensamiento audaz y en Trane nuestros compromisos a corto y largo plazo reflejan los cambios necesarios para transformar la industria HVAC ahora y en el futuro. En 2014, establecimos nuestro primer conjunto de compromisos climáticos y los superamos dos años antes. Desde entonces, nuestras ambiciones y acciones han crecido, con un progreso significativo hacia compromisos audaces de sustentabilidad para 2030 y el objetivo de carbono neto cero para 2050”, concluyó Carlos García.
Con información de Trane