En las últimas décadas, las ciudades han poblado los cielos con construcciones que aspiran a llegar cada vez más alto. Los edificios corporativos y de corte comercial se abren espacio en la geografía urbana para conquistar el título del desarrollo más elevado y vanguardista. Una propuesta diferente rompe con la búsqueda de las alturas: Garden Santa Fe, proyecto que destaca por no contender entre los rascacielos, sino por sumergirse en las entrañas de la Tierra.
Eréndira Reyes / Bruno Martínez, fotografías.
Al poniente de la Ciudad de México, casi como una ciudad independiente dentro de la zona metropolitana, Santa Fe abraza en sus linderos innumerables desarrollos de grandes edificaciones que albergan los corporativos de muchas de las principales compañías que desarrollan su actividad económica en el país. Tiendas departamentales, restaurantes, centros de negocios y edificios futuristas son un rasgo característico.
En esta última clasificación –el diseño futurista–, el complejo comercial Garden Santa Fe se ha ganado un lugar a fuerza de originalidad. Su principal rasgo: construcción subterránea. Esta característica logra que el desarrollo pase desapercibido a simple vista, pues sólo al acercarse al área de la cúpula exterior se distinguen los distintos niveles que componen el centro comercial, el cual se adentra y conquista lo que sólo algunos seres vivos han logrado: habitar el subsuelo.
La distancia que existe entre el último sótano de estacionamiento y el jardín superficial con el que cuenta asciende a 33 metros, lo que significó un verdadero reto ingenieril, comparado, tal vez, con proyectos como el de la línea siete del Sistema de Transporte Colectivo Metro, el cual desciende hasta 40 metros bajo el nivel de calle.
En términos visuales, el jardín exterior destaca como un verdadero oasis verde entre la monocromía de los corporativos, hoteles y restaurantes que se encuentran a su alrededor. Sus 30 mil arbustos y 200 árboles se complementan con un teatro al aire libre, espejos de agua y fuentes que decoran el microecosistema del centro comercial.
En cada nivel del centro comercial se suministra aire limpio a través de un sofisticado sistema de ventilación
Durante el proceso de desarrollo, la construcción contempló varios retos. En principio, durante las labores de excavación se tuvieron que colocar pilas de concreto de 30 metros de profundidad y 1 metro y medio de diámetro; igualmente, anclas de acero tensado para evitar que los edificios aledaños se dañaran, así como evitar que se hundieran las calles. Además de estas estructuras, se agregó un muro de contención de concreto y losas prefabricadas durante su excavación.
El diseño arquitectónico y la ingeniería se complementaron con dos conos de cristal que brindan iluminación y ventilación natural y evitan que se generen olores desagradables en los comercios. Ambos conos están hechos de cristal templado con una película que protege el interior contra los rayos ultravioleta (UV). Para posibilitar la entrada de luz sin dejar ningún rincón oscuro, el espacio entre ambos conos de cristal se calculó con gran precisión.
Las dimensiones totales del terreno ascienden a 12 mil metros cuadrados construidos, de los cuales 8 mil están destinados para áreas verdes que cumplen tanto funciones visuales, como de purificación de aire y control de temperatura.
Toda la tubería se encuentra aislada para evitar que el aire distribuido no pierda frío
Tratamiento de aire bajo tierra
Para brindar características climáticas aptas, el complejo cuenta con sistemas de aire lavado, chillers, torres de enfriamiento, extractores, inyectores y purificadoras de agua. El diseño del sistema de aire acondicionado corrió a cargo de la empresa IACSA y el sistema de automatización fue diseñado e instalado por la compañía Logen, S.A. de C.V.
Los sistemas de aire lavado alimentan el sistema de ventilación del centro comercial a través de todo el perímetro del inmueble. Se pueden observar las cajas de ventilación por donde entra el aire fresco, lo cual es posible gracias a la ubicación de los sistemas, los cuales se localizan paralelamente en los extremos del centro comercial.
Garden Santa Fe cuenta con tres chillers que garantizan el confort en el centro comercial
Cuatro colosales sistemas de aire lavado se encuentran en un eje y otros cuatro en el eje frontal. Para su correcto funcionamiento se abastecen de agua potable, lo que evita sedimentos y partículas anómalas. El agua resultante pasa a un depósito que se encuentra en la parte baja del sistema; cuando el flotador registra aproximadamente 10 centímetros de profundidad, se enciende el sistema de bombas y empieza a levantar el agua, la cual escurre y crea una cortina que humedece una serie de paneles en el interior del sistema. El proceso continúa cuando el ventilador de los sistemas extrae el aire, lo introduce en las cajas de ductos y posteriormente lo suministra a todo el centro comercial.
Cada equipo cuenta con un inversor y un variador de frecuencia, de tal forma que se arranca primero con las bombas y después con los variadores. Todo el esquema de funcionamiento es controlado a través de un sistema de automatización integral.
El tendido de la ductería es bastante extenso, pues desciende hasta cada uno de los sótanos de estacionamientos y suministra el aire a través de cajas de ventilación; además, cada una de las escaleras cuenta con un sistema de presurización y un extractor de aire. La inyección que registran por minuto es de 1 mil pies cúbicos por minuto durante un horario de cinco a doce de la mañana.
Para mayor protección, todos los equipos cuentan con sistema de puesta a tierra para impedir daños por fallas eléctricas
El monitoreo del funcionamiento de cada uno de los sistemas se registra en el sistema de automatización, lo que permite que a pesar de operar por tantas horas el gasto energético sea menor, ya que los sistemas que no sean necesarios en ciertas áreas no son utilizados, con lo que se evita el desperdicio de energía.
Garden Santa Fe abrió sus puertas el 15 de mayo de 2014 –hace casi cuatro meses–; sin embargo, previo a su apertura formal, se llevaron a cabo pruebas en sus distintos sistemas para verificar que su funcionamiento fuera correcto.
En cuanto a las consideraciones sustentables, el centro comercial tiene un sistema de captación de agua pluvial, dividido en tres grandes tanques que recolectan aproximadamente 450 mil litros de agua de lluvia a diario. Esta agua se filtra y posteriormente se pasa a una cisterna de tratamiento, tras lo cual se emplea para abastecer el sistema de riego y de servicios sanitarios.
Las unidades de aire lavado están estratégicamente instaladas en el inmueble con el fin de suministrar aire limpio
Cabe resaltar que el proyecto tiene grandes ahorros en agua potable, pues normalmente se requieren cerca de 217 mil litros de agua por día para las labores de riego y las necesidades sanitarias; pero gracias a la captación de agua sólo se utilizan 70 mil litros diarios adicionales, los cuales se abastecen con agua tratada.
Según datos relacionados con la posición geográfica de la edificación, que se ubica en la demarcación de Cuajimalpa, la cantidad promedio de precipitaciones en temporada de lluvias suele superar los requerimientos de agua para el centro comercial; cuando esto sucede y la capacidad de los tanques se sobrepasa, se activa un sistema de bombeo de demasía que se encarga de sacar el excedente a la calle.
La estructura cuenta con un tratamiento especial para evitar la filtración de agua, debido a que el jardín abarca la totalidad de la superficie del centro comercial y es necesario controlar la humedad que se genera, a fin de evitar la proliferación de hongos y otros microorganismos en el interior.
Cada sistema es monitoreado y sometido a labores de mantenimiento para garantizar un óptimo funcionamiento
Ahora bien, para lograr una extracción adecuada en sanitarios y locales comerciales se tiene un extractor central de sanitarios con una potencia de 30 cth cúbicos, el cual se encarga de sacar el aire y los olores de los distintos baños públicos con los que cuenta el centro comercial. También se tienen cuatro extractores encargados de extraer el aire de locales comerciales.
Para lograr que la extracción de aire sea homogénea se colocaron los equipos de forma paralela, dos en un ala y dos más en el ala paralela del centro comercial.
Operación
Garden Santa Fe cuenta con tres chillers de 198 toneladas de refrigeración, tres torres de enfriamiento y tres purificadoras de aire. Los chillers presentan un rango de flujo aproximado de 1 mil 400 litros por minuto. Esta agua helada suministra a los equipos de aire acondicionado de los locales el frío necesario para generar una temperatura confortable.
El bombeo del sistema tiene una gran demanda, por lo que su correcta operación es imprescindible
Esto lo logra gracias a la red de tuberías que conecta el sistema de agua helada con los equipos particulares; su función es dejar unas puntas en la red y llegar a los equipos de los locales. El control de temperatura y requerimientos se puede monitorear, aunque cada una de las tiendas se encarga de controlar sus equipos individualmente.
Esta tubería se encuentra aislada por completo para evitar la pérdida de frío. La temperatura de inyección está establecida en un rango de entre 20 y 22 grados centígrados, con una presión de 4 kilogramos por centímetro cuadrado; el retorno presenta una diferencia de entre 2 y 3 grados, y una presión de 3.5 kilogramos por centímetro cuadrado. La forma en la que operan es constante, por lo que, a pesar de contar con tres equipos, normalmente se utilizan sólo dos y uno se mantiene en descanso para que su eficiencia y vida útil sean mayores.
Los equipos están conectados a un sistema de automatización sofísticado que gestiona su operación
Para regular la operación de los equipos, el sistema de automatización registra los horarios de cada una de las tiendas y las necesidades que requieren para evitar el desgaste innecesario de los equipos. En cuanto al mantenimiento, cada tres meses se les proporciona servicio preventivo gestionado a través de una empresa que ayuda a que los sistemas mantengan un buen funcionamiento.
Además de los chillers, el sistema HVAC se complementa con tres torres de enfriamiento que a pesar de encontrarse en el subsuelo logran tener conexión con el exterior a través de una red que vincula el aire y agua de afuera. El agua que utilizan es potable y están colocadas justo encima de los chillers. Éstas operan con tres bombas que envían el agua helada que generan los chillers; a través de la ductería y de otras seis bombas se inyecta el aire necesario en el centro comercial. Al igual que el sistema de agua helada, el mantenimiento que reciben es preventivo.
El suministro de aire frío se aplica tanto al centro comercial, como al área de comida rápida
Dentro del centro comercial se desarrolló un área de comida rápida, donde se instalaron tres purificadoras de aire que extraen las partículas de grasa, los olores y las emisiones de calor que se generan en las cocinas. Cada purificadora da servicio a un grupo de 6 a 8 locales, que deben mantener una calidad de aire óptima y de acuerdo con los parámetros particulares que han definido.
La extracción en estos equipos es de 4 mil 800 pcm, con una reposición de 0.9 por ciento de la extracción. Su función principal es extraer el aire de los locales para posteriormente remover un contaminante específico; en este caso, el principal elemento removido es la grasa que se produce en las cocinas, pero también retiran gases, olores y otros compuestos orgánicos volátiles.
Tras la extracción, el aire se purifica y se le adiciona aromatizante para que retorne al local y mantenga una temperatura adecuada y un aire agradable de respirar. Es de resaltar que este tipo de equipos debe mantener un caudal de aire máximo de 500 metros cúbicos por hora y contener una media filtrante HEPA de 95 por ciento. Está programado para extraer cada 15 segundos el aire contenido en el interior de los locales, limpiarlo y retornarlo a los 45 segundos por minuto de operación.
Área de estacionamientos
La infraestructura total del inmueble se divide en siete plantas: tres niveles para los locales y áreas comunes del centro comercial, y cuatro niveles de estacionamientos, con un aforo total para 1 mil 600 vehículos.
Para brindar una ventilación adecuada a las áreas de estacionamientos se requirió un estudio previo en el que se localizó la dirección y fuerza del viento que impactaba al edificio. Gracias a esto, se determinó que los extractores estuvieran en la sección sur y los inyectores en la sección norte de la infraestructura.
De igual manera, se instaló un sistema que monitorea la cantidad de monóxido de carbono que emiten los automóviles para evitar que alcancen concentraciones nocivas para los visitantes. Los niveles deben estar dentro de norma.
Toda la infraestructura está integrada a un sistema BMS para que la operación sea más sencilla y eficaz
Así pues, cada nivel de estacionamiento cuenta con 29 extractores y 36 inyectores distribuidos a lo largo y ancho de cada uno de los sótanos para cumplir con las renovaciones de aire previstas. Como todos los sistemas del centro comercial, éstos también se encuentran conectados a un sistema de automatización central.
Su funcionamiento está regulado por horarios y por las variaciones en la concentración de CO; una computadora central supervisa sus condiciones de operación y mantiene registros de su uso.
El funcionamiento por horario opera en horas pico: se activa durante 10 minutos para garantizar la calidad de aire necesaria.
Para notificar oportunamente cualquier conato de incendio, el centro comercial cuenta con un panel de control de humos central
Los ventiladores de inyección y extracción que sirven para proporcionar aire nuevo en sótanos se activan cuando los sensores de monóxido de carbono detectan un nivel superior al determinado por norma, por lo que se envía una señal al controlador para que opere la función ON/OFF.
Con esto se activan los sistemas de ventilación y extracción durante 2 minutos, y posteriormente se vuelven a monitorear los niveles de partículas en el aire. Si la densidad de contaminantes continúa siendo desfavorable, se vuelven a activar los extractores e inyectores hasta que se consiga un aire seguro.
El monitoreo de CO en estacionamientos verifica que la calidad del aire sea óptima y segura para los ocupantes
Automatización
Las labores de supervisión, control y operación automática de los sistemas se llevan a cabo en el cuarto de control. En este sitio está concentrado todo el sistema de gestión de Garden Santa Fe, el cual cuenta con un sofisticado sistema de seguridad instalado en cada una de las áreas del inmueble, lo que ofrece certeza al usuario de que se encuentra en un sitio seguro.
Toda la infraestructura está integrada en un sistema BMS para que la operación sea más sencilla y eficaz.
El sistema de automatización contempla la operación del alumbrado en áreas comunes, los equipos de aire acondicionado, el sistema de video vigilancia, entre otros. El proyecto total de automatización fue diseñado por la empresa Logen, especialista en este tipo de esquemas.
Entre sus logros, destaca el control de temperatura del centro comercial, que oscila entre 20 y 22 grados centígrados durante todo el día, así como el monitoreo de CO en estacionamientos, que no puede rebasar 30 partículas por millón, y los sensores de presencia instalados en baños, los cuales encienden y apagan las luminarias de acuerdo con la ocupación del espacio, así como los extractores de aire.
El sistema BMS se comunica con los chillers, las unidades manejadoras de aire, las ULA y los ventiladores de los sótanos de estacionamientos para lograr estos parámetros. También tiene un sofisticado sistema de detección de humo instalado en cada nivel para sofocar cualquier evento incendiario. Los locales incorporados a este sistema igualmente son supervisados, aunque con un ligero desfase temporal; a pesar de que tienen su propio panel de control, se monitorea el estatus de su equipo y las alarmas por incidentes relacionados con la seguridad del lugar.
Para notificar oportunamente cualquier evento o conato de incendio se activa una alarma en el centro de control; posteriormente se verifica si existe un problema, en cuyo caso se activa el sistema de evacuación el cual protege las vidas de los ocupantes al extinguir el incendio lo antes posible.
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Agradecemos a Eduardo Zapiain, de Logen, y a Carlos Lavastida y Carlos Leñero, de Garden Santa Fe, por las facilidades para la realización de este reportaje.
