Para el director general de Carrier México, el negocio del aire acondicionado todavía tiene un gran potencial por desarrollar
Danahé San Juan / Fotografías: Mundo HVAC&R
El nivel de ingeniería, creatividad, innovación e interacción entre gente y tecnología es lo que fortalece a una industria como la del aire acondicionado y la refrigeración. Quizá lo que hace falta es continuar difundiendo información sobre las virtudes de este sector, tanto para beneficio humano, como empresarial, profesional y económico. En una industria con tantas aristas, lo que se necesita es atraer talento joven, reflexiona Manuel Gutiérrez, director general de Carrier México: “Ante situaciones complicadas, no hay que ver un problema, sino una oportunidad de crecimiento”.
Ingeniero Mecánico Electricista egresado del TEC de Monterrey, considera que el fortalecimiento constante de las habilidades profesionales es fundamental para hacer frente a los desafíos del sector y de la naturaleza, tal como ahora sucede con la pandemia de covid-19.
En entrevista con Mundo HVAC&R, recuerda que cuando comenzó su trayectoria profesional el país atravesó una crisis económica que implicó la devaluación del peso y un importante ajuste a la economía. A partir de ese acontecimiento, concluyó que una manera efectiva de enfrentar situaciones similares es a través de la formación profesional. Así, decidió prepararse con un Master in Business Administration (MBA), en 1995, por el TEC de Monterrey; posteriormente, el programa en Alta Dirección, en 2015, por el IPADE, así como un programa de educación ejecutiva enfocado en crecimiento e innovación en la Escuela de Negocios de Harvard.
“En el arte de dirigir hay muchos procesos. Uno de ellos es como el método científico: observar, sembrar hipótesis, armar puntos de acción y concretar acciones para lograr los objetivos”
Mundo HVAC&R (MH): ¿Cómo ha evolucionado la compañía desde el inicio de su dirección en 2008?
Manuel Gutiérrez (MG): Nos hemos movido por varias estrategias. Recién, la que nos ha da más certidumbre son los cuatro ejes que trabajamos de forma interna: productividad a su máxima expresión y radicalmente aumentada, innovación, enfoque al cliente y velocidad en el servicio. Estos ejes definen la cultura de trabajo de todas las áreas y se construyen bajo un esquema de mucha integración entre la realidad de los clientes y nuestros colaboradores.
MH: ¿Cuál fue el reto principal que enfrentó para lograr su posición actual?
MG: Sin duda el autoaprendizaje. Esto es algo que trato de hacer ver a todos los colaboradores porque creo que ahí hay una constante para el conocimiento en el sector. Hay que generar procesos de autoconocimiento y de autoaprendizaje para estar al día. El otro punto es mantener al equipo interesado. Se escucha fácil, pero con la situación que vivimos de la operación remota, podría ser más complicado mantener a la gente alineada a los objetivos. Se requiere capacidad y sensibilidad para anticiparse a los hechos y resolverlos.
MH: ¿Cuál es su perspectiva de la industria HVACR en México?
MG: El bono demográfico de la población mexicana es favorable porque la mayoría es joven. Se prevé que habrá muchas necesidades de servicio e infraestructura relacionadas con el control de temperatura, humedad, condiciones ambientales, esparcimiento y atención a la salud. Estos ámbitos se relacionan con el aire acondicionado, la tecnología y el confort. México vive una posición privilegiada y se espera un mercado muy interesante.
MH: ¿Cuáles son los planes de inversión de la compañía para desarrollo tecnológico e investigación en México?
MG: Carrier tiene seis plantas de fabricación en Monterrey y junto con nuestro Centro de Distribución nos enfocamos en producir equipos, pero también trabajamos en investigación y desarrollo. Las cadenas de suministro que hay alrededor de estas fábricas han desarrollado una gran cadena nacional, es decir, cada equipo impacta económicamente en varios sectores.
MH: ¿Qué tendencias e innovaciones vislumbra a futuro?
MG: Hay mucha evolución en cuanto a tecnología y digitalización en la industria. En el training adaptamos un administrador de garantías, un chat atendido por un robot que procesa los eventos, los registra y les da seguimiento. En cuanto a los equipos, la electrónica digital permite, por ejemplo, en los minisplit, tener un punto de red para administrar el encendido, apagado, monitoreo, control de temperatura, etcétera, de manera automática o remota. Otro punto es el cambio de refrigerantes; para 2023 estos evolucionarán y se viene todo un proceso de investigación y desarrollo para adaptar los equipos a esos nuevos refrigerantes.
MH: ¿Cuál es su estrategia para reforzar la posición de la marca y la innovación tecnológica en el país?
MG: Partimos de la necesidad de un cliente, pero si lo analizas en función de beneficios o espacios físicos, lo que prevemos es una oportunidad de reemplazo del 70 por ciento de producto. Tenemos clientes que buscan construir operaciones nuevas, pero dada la huella de los equipos que ya tienen, es más importante reemplazar. En ese proceso emergen tecnologías como los compresores con variador de frecuencia, sistemas de monitoreo y equipos que aprenden cómo funciona un edificio y cuentan con un control para adaptarse a las circunstancias. El otro tema es la capacitación en la industria. Carrier utiliza herramientas físicas, electrónicas y digitales para incluso proporcionar capacitaciones en línea.
MH: ¿Qué acciones impulsa Carrier para reducir su huella de carbono?
MG: Las fábricas de Carrier siguen procesos de certificación con el criterio LEED para edificios existentes y nuevos, así determinamos lo que se hace con los desperdicios, uso racional de la energía, entre otros puntos. En los espacios de oficina, el nuevo corporativo de Carrier en Florida es un edificio que tiene todas las tecnologías integradas para un máximo aprovechamiento energético y menor huella de carbono. Además, participamos activamente desde el trabajo en oficina, fabricación de productos y atención a los proyectos de los clientes que requieren cumplir el puntaje para una certificación.
MH: ¿Cómo cuida la empresa del medioambiente?
MG: En esta industria, el negocio de los refrigerantes tiene un impacto ambiental. Nuestra tecnología siempre ha sido vanguardista. Recordemos que Carrier fue el fundador del U.S. Green Building Council y ha innovado en cuestiones de certificación LEED. En México también fuimos fundadores del mismo capítulo. La compañía siempre ha participado en el uso de tecnología y refrigerantes amigables con el medioambiente, por lo que colaboramos con fabricantes de refrigerantes para delimitar lo que mejor convenga.
MH: En un contexto de crisis sanitaria por la covid-19 ¿cómo puede ayudar el sector HVACR?
MG: La industria del aire acondicionado, en el caso particular de Estados Unidos, está considerada esencial para la vida cotidiana del ser humano. Entonces, la fabricación y distribución de sistemas de control ayudan a manejar la humedad y controlar la temperatura, dos aspectos relacionados directamente con la salud y la seguridad en muchos lugares, como hospitales. En México, nuestra tecnología se encuentra en hospitales, laboratorios o de procesos industriales donde se requiere el máximo control de partículas, temperatura, etcétera.
MH: ¿México está preparado para enfrentar los desafíos económicos y de salud?
MG: Creo que ningún país estaba preparado para enfrentar esta situación. Laboralmente, la modalidad del home office ya la habíamos implementado desde antes, por lo que esta contingencia no representó un gran desafío. Lo que hemos observado es la dinámica con la atención a clientes, proveedores y toda la cadena de suministro que participa para que un cliente reciba un producto. Ahí es donde realmente está el reto: mantenerse conectado con la necesidad del cliente y anticiparse a sus necesidades, pues al no tener el contacto físico, la sensibilidad se puede perder.
MH: ¿Qué estrategias de capacitación implementa la compañía para los diferentes eslabones que le dan vida?
MG: Carrier tiene filosofías de trabajo en los centros de manufactura, seguridad y ética muy especiales, lo cual hace que la marca se distinga en el mundo. Un ejemplo es la continua capacitación a los proveedores con los que trabajamos. Cada año se hace una convención en la que se revisan estos temas para mantener un ambiente de relaciones laborales positivas, así como en temas de distribución, ventas, ingeniería, mantenimiento, etcétera.
MH: ¿Cómo ha forjado su liderazgo a lo largo de los años?
MG: En el arte de dirigir hay muchos procesos. Uno de ellos es como el método científico: observar, sembrar hipótesis, armar puntos de acción y concretar acciones que permitan lograr los objetivos. Todo esto requiere de una integración en la que el juicio y el criterio se perfeccionan. El manejo de los equipos de trabajo es fundamental, pero también el manejo de su energía. Es decir, tener la sensibilidad de identificar estrategias de colaboración, coucheo, dirección, etcétera. Al final, dirigir personas requiere de mucha sensibilidad y otras virtudes que se perfeccionan a lo largo del tiempo y con la experiencia. Eso sería la esencia del liderazgo.
MH: ¿Bajo qué valores rige su labor como director general?
MG: El compromiso y mantener una actitud positiva y optimista frente a los obstáculos. Siempre van a existir complicaciones, pero lo relevante es cómo enfrentarlas y librar cada una de estas circunstancias de forma positiva. Ante situaciones complicadas, no hay que ver un problema, sino una oportunidad de crecimiento.
MH: ¿Cuál es su principal objetivo como director general de Carrier México?
MG: Cumplir con los objetivos establecidos cada año por la empresa y avanzar en diferentes áreas para que eso ocurra, a través de una serie de acciones que hay que ir planificando y ajustando para que los procesos avancen y se traduzcan en beneficios para el cliente, los colaboradores y los accionistas de Carrier.
MH: ¿Cuál ha sido su mayor éxito profesional en esta industria?
MG: Ver a la gente contenta y saber que está casada con la marca desde el punto de vista del colaborador y del cliente.
MH: Si no fuera director de una compañía del sector de la climatización ¿dónde le gustaría estar?
MG: Tengo muchos intereses diferentes a la cuestión laboral. Uno de ellos es el desarrollo de las personas, la perfección de sus habilidades, talento y competencias para contribuir a una mejor sociedad.
MH: ¿Cuál es su filosofía de vida y cómo ayuda a su desarrollo personal y profesional?
MG: Fundamentalmente es la contribución a los demás. Dejar una huella positiva en todas las personas con quienes se tiene interacción.
MH: ¿Cómo equilibra su vida personal con la profesional?
MG: Debes tener una agenda organizada y planear las acciones prioritarias para darles seguimiento y trazabilidad. Eso sirve mucho en la administración eficiente del tiempo con los clientes y el personal.
MH: ¿Qué consejo daría a una persona que desea desarrollarse profesionalmente en esta industria?
MG: Hay ciertos elementos básicos: tener conocimientos técnicos sólidos es fundamental, y un balance con las habilidades de comunicación, trabajo, sensibilidad, inteligencia emocional, olfato para las cuestiones comerciales, gran capacidad de razonamiento, visión y un objetivo muy claro. Si no sé a dónde voy, no podré enfocar mis capacidades.