Ing. Francisco Sánchez
Johnson Controls
En 1990, el gobierno federal creó el Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE), con el objetivo de promover el uso racional de ésta y obtener ahorros energéticos aplicables para usos residencial e industrial. Adicionalmente, empresarios y asociaciones han desarrollado productos y procedimientos que promueven tecnologías cuyos consumos energéticos sean sustancialmente menores.
Sin embargo, muchos queremos avanzar hacia una cultura del ahorro energético cuando no hemos entendido a bien qué es lo que nos cuesta producir la energía, distribuirla y consumirla. Se desconocen de forma masiva los impactos económicos, sociales y ambientales relacionados con la producción y consumo de los diferentes energéticos, en particular de la eléctrica. Una solución sería buen modelo de enseñanza referente a la producción y uso de la energía, aplicado a todos los niveles de educación, para lograr un cambio cultural en los siguientes 10 años.
Además en México, la mayoría de los fabricantes cuenta con herramientas, que en base a condiciones de operación normales de los equipos pueden proyectar los ahorros de los nuevos productos y sistemas, determinando el ahorro energéticos que se genera por la adopción de estas nuevas tecnologías, y estipulando un tiempo promedio, en el cual se retornaría la inversión para sustituir los equipos existentes. Estos periodos de retorno sobre inversión (ROI) suelen ser estimados entre seis meses y tres años.
Para el caso de inmuebles comerciales, el consumo energético mayor se concentra en dos sistemas: aire acondicionado e iluminación. Dependiendo del tiempo de operación, así como del mantenimiento, podrán tenerse proyecciones de ahorros energéticos en mayor grado. Lo que sí es una máxima, es que el ahorro energético es inversamente proporcional al mantenimiento y operación adecuada de los sistemas. Es decir, cuando se tiene un buen mantenimiento y se operan adecuadamente los sistemas, se pueden esperar ahorros menores al momento cuando no se contaba con programas adecuados de mantenimiento o una pobre operación.
En nuestro país tenemos muchos ejemplos de construcciones que incorporan conceptos de eficiencia energética, que son ya una realidad y otros que están evaluando para incorporarse a ella, los que cada día más empresas y empresarios buscan. Muestra de ello es la Torre del Banco HSBC, que se encuentra en la avenida Paseo de la Reforma en la ciudad de México. Este edificio cuenta con una certificación LEED, ya que desde su diseño hasta su implementación, se consideraron los elementos más sustentables y de menor impacto ambiental, mismos que los hacen un proyecto muy completo y con un sinnúmero de ejemplos de cómo se puede ahorrar energía en un inmueble.
Cada fabricante y proveedor busca eficientar el consumo energético en los inmuebles, ya sea de forma directa en sistemas de aire acondicionado, iluminación, equipos electrónicos; o de forma indirecta en vidrios y películas, mobiliario, fachadas y más.
Además las nuevas herramientas de administración de inmuebles contemplan la generación de indicadores de evaluación del negocio con base a tres aspectos: impacto económico, energético y ambiental del inmueble. Sin embargo, en muchas ocasiones la tecnología está por encima de lo que estamos dispuestos a conceder como sociedad, por lo que debemos esperar algunos años a que estos conceptos logren permear los medios inmobiliario y social, para obtener los beneficios esperados.
Otro aspecto importante es que este tipo tecnologías no son costosas y mucho menos si se considera los enormes beneficios de adoptarlas, además de prever las consecuencias de seguir operando de la misma forma como hasta ahora se ha hecho, sin tomar en cuenta la diferencia en costos a mediano y largo plazo.
Lo significativo de este tema es el aspecto de concientización personal. La cultura del ahorro energético debe vivir en cada uno de nosotros.
Todos debemos ser sus promotores y educadores para establecer los parámetros a interactuar en nuestra casa y trabajo, teniendo en cuenta como principio “cubrir las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las necesidades de las del futuro”.
Recomendaciones para eficientar sus inmuebles |
a) Buscar asesoría con empresas serias que cuenten con una infraestructura de servicio que demuestre su interés por existir más allá de la simple comercialización de productos.b) Evaluar diferentes opciones para obtener ahorros energéticos, desde la opción más simple hasta la más avanzada, entendiendo las diferencias entre cada una de ellas.c) Alinear las estrategias de ahorro de energía con los objetivos y visión de la empresa.d) Evaluar de forma simultánea, los impactos sociales y en el medio que cada una pueda tener, de forma que su valoración sea integral y la decisión a tomar sea más fácil. |
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1 comentario
ME ES GRATO SALUDARLOS ASI COMO FELICITARLOS POR CREAR ESTAS ACCIONES PARA EFISCENTIAR LA ENERGIA EN TODOS LOS AMBITOS DE LA INDUSTRIA EN RAMO DE REF.Y A/A. ADOPTA Y ADAPTA LAS NUEVAS TECNOLOGIAS Y ASI PODER AHORRAR ENERGIA SUSBTENTABLE GRACIAS POR ESTE ESPACIO HASTA LUEGO…