Arq. José Wilford Nava Townsend,
Coordinador de la carrera de Arquitectura de la Universidad Iberoamericana.
Las bases de un proyecto son la clave para crear un espacio inteligente que funcione de manera óptima; la planeación lo es todo.
Quienes tienen que ser inteligentes son los arquitectos, no los edificios
Escuchar hablar sobre los edificios inteligentes es cada vez más común, sin embargo, es importante saber qué elementos debe reunir una construcción para que ésta sea considerada inteligente. Desde mi punto de vista existen dos líneas que se deben seguir invariablemente para lograrlo: la tecnológica y el proyecto.
Por un lado, contamos con todos los avances que la ciencia y tecnología perfeccionan día a día y que a través de cierta programación realizan funciones que no sólo permiten importantes ahorros, sino que también brindan confort a sus usuarios.
Por otra parte la planeación y visión del arquitecto o ingeniero juegan un importante papel dentro del desarrollo de cada conjunto. No basta recurrir a la tecnología que reduce el uso de energía, es fundamental que el diseño contemple orientaciones, clima, materiales, iluminación y muchos otros aspectos que aporten desde el proyecto arquitectónico para ayudar a reducir costos y optimizar el uso de los recursos.
Una vez aplicados todos estos factores se verán beneficiados tanto los habitantes del inmueble como sus propietarios. Este tipo de construcciones están diseñados especialmente para brindar confort al usuario final, así como un espacio agradable que propicie bienestar. De igual manera, los dueños cuentan con un producto que ofrece un valor agregado y cuya inversión se pagará en poco tiempo.
Los beneficios que brindan los edificios inteligentes son muchos, pero para gozar de ellos es importante conocer los retos que se pueden presentar en el camino. Cuando se desean implementar algunos cambios a edificios existentes se debe revisar el diseño original para evaluar qué tan viable es modificar instalaciones y espacios para acoplar los sistemas necesarios; pero cuando se habla de un nuevo desarrollo es importante tomar en cuenta las dos líneas mencionadas al principio, para conseguir el máximo aprovechamiento complementándolo con la tecnología que responda a las necesidades específicas de éste.
Hoy más que nunca es importante conjuntar las necesidades de las personas con el cuidado del medio ambiente, por lo que es necesario llevar a cabo las medidas posibles para lograr espacios inteligentes que vayan más allá.
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