Sistema de refrigerantes variables

Adaptados a las tendencias ecológicas, los sistemas de aire acondicionado han modificado su funcionamiento en los últimos años al incrementar su eficiencia y añadir refrigerantes que no dañan la capa de ozono.

Por: Ing. José Antonio Torres Zavala

Debido a las necesidades desprendidas de la concientización para aumentar el cuidado del medioambiente, la industria del aire acondicionado se ha visto orillada a la creación de sistemas amigables. Hoy en día, gracias a su evaluación paulatina, se puede encontrar en el mercado una amplia gama de equipos enfriados por aire de 1.0 kW por tonelada, cuando anteriormente daban 1.4 kW por tonelada. Los equipos enfriados por agua alcanzaban 0.7 kW por tonelada y ahora están en existencia en versiones de operación de 0.4 kW por tonelada, lo que hace evidente el cambio.

Partamos de los sistemas de expansión directa, los cuales enfrían con refrigerante y no con agua, por lo que han requerido de adaptaciones impulsadas por certificaciones como la LEED, que al pasar del tiempo despiertan mayor interés en los profesionistas que se manejan dentro del ámbito de la industria de la construcción y la ingeniería.

De esta forma, surgen los sistemas variables de refrigeración, equipos que no sólo modificaron sus dimensiones y funcionamiento, sino que se integran al cuidado del medioambiente en todos los aspectos, operando con el nombre de refrigerantes ecológicos, como el R-410A y el innovador sistema refrigerante variable, con altos índices de eficiencia a cargas parciales.

Si se recapacita sobre este aspecto, podemos decir que en la actualidad los aparatos de expansión directa se han vuelto una opción viable  para acondicionar edificios comerciales, cosa que antes no era muy común. Por si fuera poco, constantemente se realizan mejoras en su funcionamiento, lo que permite un extenso recorrido en las trayectorias de las tuberías, aspecto que parecía imposible de alcanzar años atrás.

Las variables del sistema son amplias y van desde:
1. Dimensiones más compactas de los equipos
2. Capacidades de enfriamiento a manejar, que los hace modulares
3. Distancia a considerar
4. Precio, que los hace competitivos

Por dichas razones, estos equipos se abren paso con mayor frecuencia en el mercado, ya que ahora son posibles de adaptar en casas habitación, oficinas, escuelas, almacenes, etcétera.

La forma más usual en su instalación es la colocación de módulos de acuerdo con su capacidad por cada nivel del edificio. Con esto, se alcanza una versatilidad en el sistema que resulta interesante a la hora de dar soluciones al cliente, ya que en lugar de tener grandes huecos para bajar ductos, exclusivamente bajarían dos tuberías: una de entre 1-1/8”Ø y 1”Ø destinada para la línea de succión y la otra de entre ½”Ø y ¾”Ø para la línea de líquido.

En estos aparatos, además, se han implementado elementos o accesorios para ayudar a conseguir los recorridos en las distancias a vencer; implementando branch y cajas distribuidoras.

Otra característica importante es la manera en que se  interconectan las dos partes que complementan al equipo. Por un lado, tenemos la unidad condensadora y por el otro, la unidad evaporadora.

Es preciso puntualizar que actualmente la unidad condensadora puede conectarse a varias unidades evaporadoras, dependiendo de su capacidad, para dar servicio a diferentes zonas a acondicionar. Asimismo, las modificaciones efectuadas en este tipo de dispositivos los transformaron en bombas, que no sólo suministran frío o calor, sino que pueden realizar las dos funciones al mismo tiempo.

Como plus, destaca la forma de enfriar de los condensadores. Cuando en el mercado existían únicamente los enfriados por aire, lo que se recomendaba era que los equipos permanecieran en el exterior del edificio. En estos días, gracias a los desarrollos tecnológicos, podemos observar equipos enfriados por agua que permanecen encerrados en un cuarto de máquinas exclusivo o incluso los encontramos apilados para ahorrar espacio.

Este aspecto vuelve aún más competitivo al sistema; por ello, en lugares donde no existan problemas con el uso de agua, podrían ser utilizados con facilidad, lo que los convertiría en equipos más eficientes en relación con los kilowatts por tonelada a consumir.

Tras tomar como base esta tecnología, durante los últimos meses hizo su arribo al mercado mexicano un sistema de acondicionamiento que no utiliza el refrigerante hacia dentro del área a acondicionar, sino que lo deja en la máquina, enfriándolo con agua. El proceso es conocido como variable de agua. Se vale de refrigerante variable para trabajar y cuenta, además, con compresores digitales variables (desde cinco hasta cien por ciento) y bombas para agua de dos pasos, que se integran desde fabrica en un gabinete, logrando reducir costos de operación, ya que todo el sistema de enfriamiento se modula de acuerdo con la capacidad requerida por el usuario.

Como aspecto relevante, se debe mencionar que estos equipos están diseñados para trabajar con unidades evaporadoras y no con manejadoras de aire, lo que los hace ver como una opción interesante para ofrecer a los clientes y propietarios de los edificios.

Como podemos analizar, los sistemas de refrigerantes variables cada vez toman más auge en el mercado. Esto, como resultado de la suma de características sustentables con las que cuenta, pues los convierte en una excelente alternativa, no sólo en lo referente a lo habitacional, sino a lo comercial.

Si el fabricante considera las necesidades en torno a la eficiencia, no dudemos de que los equipos de aire acondicionado seguirán sufriendo modificaciones significativas, que darán como resultado sistemas verdes, capaces de competir entre ellos para ofrecer mayores beneficios.

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